Campo de naranjas | AVA-ASAJA

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El PP ha registrado una moción en la Comisión de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Senado para exigir al Gobierno el «riguroso cumplimiento» de las medidas fitosanitarias en las importaciones de cítricos, especialmente las provenientes de la Sudáfrica, para evitar la entrada de plagas que suponen un «grave riesgo» para el sector en España, de «gran peso» en la Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía.

En concreto, según ha adelantado la senadora Estela Darocas en un comunicado, la moción presentada por los 'populares' insta al Gobierno a exigir un «riguroso cumplimiento» del acuerdo fitosanitario firmado entre la Unión Europea y Sudáfrica en junio de 2022, el tratamiento de frío o 'cold treatment' para las importaciones de naranjas.

Para ello, el PP exige que se cumpla la Decisión de Emergencia (UE) 2016/715 para que cuando en las inspecciones comunitarias sea detectado un solo envío de cítricos afectados por la mancha negra sea «inmediatamente paralizada» la importación de cítricos del país de origen.

También pide iniciar «los procedimientos necesarios» para ampliar el tratamiento de frío a las importaciones de cítricos y frutas no cítricas procedentes de países terceros como Turquía, Egipto, Marruecos y Sudáfric y, además, ha solicitado el informe de impacto del Acuerdo Comercial entre la UE y Sudáfrica 2016-2026.

En este contexto, la senadora valenciana Estela Darocas ha subrayado que la producción española de cítricos «se cifra, según los años, entre 6 y 7 millones de toneladas, la producción media se estima, según el Ministerio de Agricultura, en 6,8 millones de toneladas».

Por comunidades autónomas, la Comunitat Valenciana es la primera productora con un promedio de tres millones de toneladas, seguida por Andalucía con dos millones de toneladas, Murcia con 800.000 toneladas y el resto de comunidades con 125.000 toneladas.

España, el primer país comercializador mundial

Darocas ha hecho hincapié en que España es «el primer país comercializador mundial» de cítricos en fresco: «Comercializa alrededor del 70% de la producción. La producción mundial de cítricos se cifra en 100 millones de toneladas, siendo China y Brasil los principales productores. Los países terceros competidores de nuestra citricultura son Egipto, Turquía, Sudáfrica y Marruecos».

En este punto, ha advertido de que los países terceros productores de cítricos «presentan plagas y enfermedades que no están presentes en la citricultura española, caso de la falsa polilla (Thaumatotibia leucotreta), la mancha negra de los cítricos (Phyllosticta citricarpa) ya detectada recientemente en Túnez y la psila africana (Diaphorina citri), entre otros».

Además, ha avisado de que la entrada de estas plagas en España provocaría «graves daños a la citricultura española como ya ha ocurrido con el cotonet de Sudáfrica (Delottococcus aberiae)». «Estas plagas incrementan los costes de producción y restan competitividad al sector citrícola español», ha lamentado.

Sobre la Decisión de Emergencia (UE) 2016/715, ha concretado que impone «requisitos adicionales» a los envíos cítricos de países con presencia de Mancha Negra (Phyllosticta citricarpa) que abarcan desde las condiciones de producción hasta muestreos intensivos tanto antes de la salida como en el punto de entrada, así como una «mayor exigencia» en materia de trazabilidad.

Del mismo modo, ha apuntado que en 2018 se «endurecieron» los términos para la importación de cítricos al incluirse una nueva plaga en la regulación comunitaria, la Falsa polilla (Thaumatotibia leucotreta). Desde el 24 de junio de 2022, para importar cítricos de Sudáfrica, se deberá realizar un tratamiento de frío.

Finalmente, la senadora del PP ha concretado que las exportaciones de cítricos de Sudáfrica a EEUU «cumplen escrupulosamente las condiciones que impone Estados Unidos: tratamiento frío, materias activas autorizadas, registro de parcelas e inspecciones in situ por inspectores norteamericanos pagados por los exportadores sudafricanos».

Sin embargo, ha cuestionado que sus exportaciones a la Unión Europea «no cumplen ninguna» de las exigencias marcadas por la Comisión, por lo que se hace «imprescindible exigir las mismas medidas a las importaciones en nuestro país», como una forma de «salvaguardar un sector tan relevante».