El joven que murió anoche arrollado en la M-30 huía de la Policía tras una persecución en coche

Todo comenzó pasadas las 23 horas de este jueves en el barrio de la Elipa, que está en fiestas. Una patrulla de la Policía Nacional vio como un hombre circulaba con un vehículo de alquiler a más velocidad de la permitida y con los cuatro luces encendidas, por lo que le dieron el alto.

Sin embargo, el conductor hizo caso omiso a las indicaciones de los agentes, por lo que comenzó una persecución. El joven entró por la M-30 por Arturo Soria. Tras chocar contra otro vehículo, se apeó del suyo a la altura del kilómetro 2 de la carretera de circunvalación, calzada interior, ya en el distrito de Chamartín.

Allí, pasadas las 23:30 horas, el perseguido intentó cruzar la M-30 por los carriles centrales, un lugar de paso indebido y con mucha peligrosidad por el intenso tráfico de la zona. De esta forma, fue atropellado, falleciendo prácticamente en el acto por el impacto de un turismo, que quedó destrozado.

Hasta el lugar acudieron sanitarios del Samur-Protección Civil, que debido al estado del joven no pudieron ni realizarle las maniobras de reanimación cardiopulmonar y certificaron su muerte. Una psicóloga del Samur tuvo que atender al conductor del turismo que le arrolló, que se encontraba muy afectado, indicaron a Europa Press fuentes de Emergencias Madrid. Fue necesario cortar los carriles centrales de la M-30 desde el kilómetro 0.

Agentes de la Comisaría Judicial de Tráfico de la Policía Municipal de Madrid, con ayuda de la Policía Nacional, se encarga de la investigación del suceso. Se desconocen las causas por las que el fallecido huyó de los agentes. Se le practicará la autopsia para comprobar si había tomado mucho alcohol o sustancias estupefacientes y analizarán su vehículo.