El consejero vasco de Salud, Alberto Martínez, en un encuentro con los medios en Bilbao. | Europa Press

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El consejero de Salud, Alberto Martínez, ha confiado en que el próximo día 30 se apruebe el diagnóstico común en la mesa de trabajo del pacto de salud y se continúe con «todos» los agentes que están participando en la siguiente fase. En esta línea, ha apuntado que, pese a que pueda haber «una escenificación» fuera de este foro, lo importante es que «de cara adentro el pacto funcione» porque la sociedad «lo necesita».

En una entrevista publicada por Deia, recogida por Europa Press, el responsable de Salud del Gobierno Vasco defiende que Euskadi tiene un sistema sanitario «potente y muy efectivo», aunque es preciso adaptarlo para poder afrontar «los cambios» que se dan en la sociedad.

Martínez pide «hacer abstracción de todos esos debates» políticos y sindicales que se generan y buscar «la mejor solución y la mejora defensa de la salud pública posible». En este marco, considera que «se han depositado esperanzas» en el pacto por la salud promovido por el Gobierno Vasco porque «la ocasión lo merece» y se requiere «una reflexión colectiva» sobre cual debe ser el sistema de salud en el futuro.

Tras resaltar el «éxito» que supone el hecho de que «prácticamente todos los actores que tienen que ver con la salud» se hayan sumado a la mesa de trabajo abierta, señala que «lo que el pacto llegue a ser dependerá de la voluntad y el compromiso de las partes».

Asimismo, incide en que, aunque pueda haber «un escenificación» que ve «legítima» y es «algo que tenemos descontado», lo importante es que «de cara adentro el pacto funcione» y se llegue a acuerdos porque «la sociedad lo necesita».

Martínez espera que en la reunión del próximo día 30 se pueda aprobar el diagnóstico común porque se parte de «un gran consenso» y dice «no tener duda» de que después «van a seguir todos» los agentes que están presentes en la mesa en las siguientes fases de trabajo (a las que van pasando los agentes que firman el acuerdo de la fase precedente).

En el centro de todas las polémicas

El consejero destaca, entre sus principales preocupaciones, el hecho de que Osakidetza «esté en el centro de todas las polémicas» y precisa que, además de la «reflexión a medio plazo» sobre el sistema de salud, en «lo inmediato» se han establecido ya «planes de choque» para listas de espera quirúrgicas y procedimientos diagnósticos y se están «dando pasos» en la Atención Primaria.

Por otro lado, asegura que cada vez se siente «más solidario con el trabajo que han llevado a cabo los consejeros anteriores» ya que es «consciente de las dificultades» que se han encontrado y, preguntado si está haciendo una 'enmienda a la totalidad' de la labor que han desarrollado, lo rechaza, subrayando que no es «casualidad» que el sistema vasco tenga «los mejores datos del entorno».

«Esto no quiere decir que en cada momento no haya circunstancias que analizar y sobre las que tomar decisiones», matiza Martínez, que reconoce que «probablemente no» tenga sentido el modelo de OPE en Osakidetza y, según explica, de hecho «en la mesa sectorial ya se ha llevado una propuesta con procedimientos más ágiles».

Tras señalar que antes de final de año se van a adjudicar 11.000 plazas y hay «dos OPE más» y el compromiso de crear 2.000 plazas estructurales más, considera que se puede cumplir los objetivos de reducción de la interinidad.

Finalmene, asegura que su intención es «dar el máximo impulso» a la mesa sectorial de Osakidetza para «alcanzar un convenio colectivo después de más de 15 años sin convenio».