Un estudio del sindicato educativo mayoritario en Catalunya, Ustec·Stes, ha asegurado que el 36% de los docentes catalanes se ha planteado abandonar su profesión y que la situación de la docencia en Catalunya es «delicada».
En rueda de prensa este jueves, la portavoz del sindicato, Iolanda Segura, ha explicado que el estudio ha contado con las respuestas de 10.414 docentes catalanes y que en los últimos años, sobre todo después de la pandemia, «se ha evidenciado un deterioro de la salud física y psíquica» de los profesores.
El informe señala que quien tiene más predisposición a abandonar la docencia son los hombres (42%) frente a las mujeres (34%); los que tienen entre 31 y 40 años (44%) frente a los mayores de 50 (25%); y los profesores de centros de adultos (40%) y de ESO (38%); y quien vive en un piso compartido (44%) frente a un piso en propiedad (27%).
Factores
Destaca también que el 37% de los docentes están dispuestos a dejar la profesión «por una de un estatus y salario similar» (37%); y que un 27% de hombres y un 22% de mujeres se han planteado abandonar la profesión este mismo año.
Los factores que, según los docentes, hacen menos atractiva una profesión son los conflictos con personas (43%), la carga mental (25%) y la burocracia (19%), lo que indica también cuáles son los «puntos que más desgastan» a los profesores de Catalunya.
Además, un 24% de los docentes dedican más de 13 horas de trabajo en casa (un 10,7% más de 16 horas semanales); un 88,6% de docentes cree que en los últimos años ha tenido un incremento del volumen de trabajo; y el 64% trabaja seis días a la semana y el 17% lo hace los siete días.
"democracia en los centros"
Los mayores de 50 años tienen más insatisfacción con el nivel de «democracia en los centros» educativos, ya que en su época las direcciones tenían más capacidad de coordinación o eran el portavoz del centro ante la administración, indica el miembro del sindicato y coordinador del estudio, Xavier Díez.
Los que están más insatisfechos en este sentido son las etapas de Primaria, ESO y FP, y quienes lo valoran mejor son las Escuelas Oficiales de Idiomas (EOI), ya que «tienen muy clara cuál es su misión pedagógica» y una forma de organización con menos reuniones y burocracia, según Díez.
Salud de los docentes
En cuanto a la salud física, el 41% de profesores dicen tener buena salud frente al 29% que no; hay un 45% que considera que su salud psíquica es insatisfactoria y un 27% la ve buena; y entre los docentes con problemas económicos, «solo un 17%» dice tener buena salud mental, mientras que el 60% la considera mala.
De esta manera, se correlaciona el malestar físico o psíquico con la percepción económica, y el estudio también señala que los jóvenes tienen «una salud psicológica peor que los más mayores», un dato que Díez lo atribuye al hecho de que cobran menos que otras generaciones.
Propuestas
Segura ha considerado que «con voluntad política se podría iniciar un camino de reversión de esta situación», y ve necesario reducir la burocracia; bajar ratios; la jornada de 35 horas semanales y la jornada continua en todos los ciclos; y que haya un protocolo único y «respuestas coherentes» ante la violencia contra el profesorado.
Otro objetivo es que «los centros educativos sean democráticos y plurales» y que las decisiones organizativas surjan del propio claustro y derogar los decretos de plantillas; que en el concurso de traslados se ofrezcan todas las plazas y dar una solución a los interinos que no se han podido estabilizar.
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