Así lo ha indicado hoy la vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias de Madrid, Innma Sanz, quien ha señalado que el Gobierno municipal «apuesta por la videovigilancia como una herramienta importante para mejorar la seguridad en la ciudad, al constatar que facilita las labores policiales de vigilancia, la detección de hechos delictivos y por su efecto preventivo, contribuyendo a la disminución de incidentes donde se implantan y haciendo que el vecino se sienta más seguro y mejore así la convivencia ciudadana».
En este sentido, ha afirmado que «se seguirá escuchando a las juntas de distrito y a los vecinos para detectar nuevas necesidades de videovigilancia donde sea técnicamente viable y policialmente útil».
El contrato que se prevé autorizar, compuesto por tres lotes, supondrá un gasto de 2 millones de euros (2.027.640) y tendrá un plazo de ejecución de 5, 6 y 8 meses para cada uno de los tres lotes, a partir del 1 de enero de 2025.
Se prevé que entren en funcionamiento a finales de 2025
Se prevé que estos nuevos sistemas de videovigilancia entren en funcionamiento a finales de 2025, agilizando al máximo los plazos administrativos y una vez recabada la autorización de la Comisión de Videovigilancia, aportando así más seguridad en estos tres entornos.
En la calle Cullera se prevé la instalación de un total de 18 cámaras, en el Parque de Pradolongo serán 14 cámaras, mientras que en el Parque Calero se ubicarán 5 cámaras. Serán, por lo tanto, un total de 37 nuevas cámaras en total.
Han sido instaladas, ha indicado la concejala, por demandas vecinales o a solicitud de las propias Fuerzas y Cuerpos de seguridad, tanto de Policía Nacional como de Policía Municipal «tanto por el efecto disuasorio que tienen, como también para poder esclarecer, en su caso, algún hecho que se pudiera producir».
«Por lo tanto, en este caso, sí es verdad que están muy vinculadas, tanto en el Parque Calero como en Pradolongo, a la actuación de bandas juveniles. Y en calle Cullera ya conocen la problemática», ha dicho la v vicealcaldesa, en referencia a los narcopisos que se han concentrado desde hace tiempo en esta zona del distrito de Latina.
Dispondrán de ia
Estas nuevas cámaras dispondrán de inteligencia artificial, lo que permitirá anticipar las posibles conductas que atenten contra la seguridad y convivencia y perseguirlas más adecuadamente y, algunas de ellas, estarán dedicadas al reconocimiento de matrículas.
Estos sistemas de videovigilancia son controlados de forma centralizada por Policía Municipal, desde espacio específico (el Centro Integrado de Señales de Vídeo -CISEVI-) donde se reciben todas las señales de vídeo y donde, mediante una plataforma de gestión, los operadores policiales pueden llevar a cabo la operativa de atención correspondiente.
«Llevamos tratando de acortar los plazos que son complicados en todos estos procesos de licitación. Primero hay que hacer un anteproyecto, luego hay que licitar el contrato durante los meses que nos obliga la ley de contratos, luego tienen un proceso de un periodo de ejecución, que en este caso es de entre cinco y ocho meses, y a partir de ahí pues ya se pueden solicitar el permiso a la Comisión de Videovigilancia, en el que está presente tanto la Delegación de Gobierno, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, la Fiscalía, en fin, todos los resortes necesarios para que se cumpla con toda la legalidad, con la protección de datos y demás», ha explicado Sanz.
Además, están pendientes del permiso por parte de la Comisión de Videovigilancia la puesta en marcha de las cámaras de la Plaza del 2 de Nayo y las de la Plaza Elíptica, que ya están instaladas en estos momentos.
Las cámaras ya operativas
En el anterior mandato municipal, el primero de Almeida como alcalde, la videovigilancia fue una de las apuestas del Consistorio en materia de seguridad, instalándose un total de 111 cámaras, un tercio de todas las de la ciudad operadas por Policía Municipal, instalándose cámaras en los barrios de Bellas Vistas (Tetuán), de San Diego (Puente de Vallecas), en el polígono de Marconi (Villaverde); y, en el distrito Centro, en los barrios de Lavapiés y de Chueca, además de renovar la red de la calle Montera y los sistemas de Lavapiés y la calle Ballesta.
En el actual mandato, que arrancó en 2023, ya se ha incrementado la videovigilancia en la Puerta del Sol, con motivo de su remodelación, con la instalación de cuatro nuevas cámaras que, unidas a las tres que ya estaban operativas, mejoran aún más la seguridad de los madrileños y de sus visitantes en este emblemático espacio y en todo su entorno. Tres de estas cuatro nuevas cámaras cuentan con alta resolución con inteligencia artificial.
Es inminente, ha añadido Sanz, la puesta en marcha de nuevos sistemas de videovigilancia --previo visto bueno de la Comisión de Videovigilancia-- en la Plaza del Dos de Mayo (Centro, 16 cámaras) y en la Plaza Elíptica (Usera/Carabanchel, 15 cámaras), ambos compromisos electorales.
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