En Artà, el Fons Barceló inaugura esta tarde una muestra con los
bocetos y dibujos del vestuario que Miquel Barceló diseñó para la
ópera cómica «El Retablo de maese Pedro», de Manuel de Falla. La
exposición se puede visitar en la Casa de Cultura de na Batlessa.
En 1989, el entonces director de la Ópera de París, Jean Louis
Martinoty, decidió abrir la tempoara de 1990 con la presentación de
esta pieza y fue Claude Picasso, gran admirador de Barceló, quien
sugirió que fuera el pintor mallorquín el autor de vestuario y
decorados.
Barceló ideó una docena de trajes, 15 figurines para insectos y
los fracs de los músicos cubiertos de excrementos de paloma. El
mismo artista dijo entonces que había querido alejarse de la España
tradicional a la hora de enfrentarse al trabajo. «Quería alejarme
de los cliches fáciles», apuntó.
En la exposición se pueden ver también los títeres y figuras que
forman parte del decorado de una obra totalmente innovadora por lo
que a escenografía se refiere. Fue la primera y, hata ahora, única
incursión de Barceló en el mundo de la ópera.
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