Miquel Barceló y el delegado de Patrimonio de la Diócesis Pere
Llabrés volvieron a reunirse anteayer para ultimar «ya un cierto
proyecto de actuación» del pintor en la Seu y de la iconografía que
abordará. El pintor plasmará su interpretación, entre otros temas,
del milagro de la multiplicación de los panes y los peces.
De lo hablado en dicho encuentro será informado el Cabildo en su
próxima reunión puesto que es este órgano quien tiene que dar el
visto bueno a la actuación de Barceló en el templo.
En la capilla de San Pedro y del Santísimo Barceló pintará el
milagro de la multiplicación de los panes y los peces, «un tema que
le interesa mucho y sobre el que se ha documentado», dijo Llabrés,
quien apuntó que el pintor «es muy receptivo a las indicaciones
iconográficas que se le han hecho». En esta capilla hay cinco
vitrales ciegos que se abrirían con vidrieras hechas por Barceló.
Además, en julio, en una reunión entre el obispo, miembros del
Cabildo y de la Universitat, se habló de la remodelación de otra
capilla, probablemente la del Sagrado Corazón, para convertirla en
sede penitencial, un lugar para celebrar el sacramento de la
penitencia según las normas actuales. En ella también se pueden
abrir tres vitrales y el tema en el que trabajaría el pintor sería
«El Hijo pródigo y la donación por parte del Espíritu Santo por
parte del Resucitado».
Llabrés también explicó que en su encuentro con el artista «se
habló de que con motivo de la realización de las gárgolas, una
veintena, se haría en la Seu una pequeña exposición de las mismas y
de obra de Barceló que no interfiriera en el culto, además de otra
exposición en el Museo Diocesano». Todo ello para 2003.
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