M.Díaz24/03/01 0:00
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La familia del fallecido escritor Bernat Vidal i Tomàs ha entregado al Museu de Mallorca una colección de piezas arqueológicas, especialmente romanas, que pasarán a formar parte de los fondos del centro. La fórmula por la que el legado ha llegado al Museu es la de depósito indefinido «que hemos aceptado», comentó Guillem Rosselló Bordoy, su director. Las piezas, que ahora se están restaurando y estudiando, serán expuestas al público una vez finalizados estos trabajos.

Rosselló Bordoy comentó que la colección está integrada por cerámicas y estatuillas romanas; cerámica de procedencia marina y estelas latinas, «todo piezas encontradas en Mallorca procedentes de hallazgos casuales». «Es una aportación importante y también debemos resaltar el hecho de que una colección privada se pueda exponer al público y esté al alcance de todos», añadió. Entre estas obras destaca una estatuilla de Ceres, un bronce inédito.

Bernat Vidal I Tomàs (Santanyí, 1918 " Palma, 1971) fue un maestro de la llamada Generación del 50, especialmente de Blai Bonet. Investigador de la historia de Santayí, en su obra de creación destacó el humor y la ironía en la novela «Memòries d'una estàtua» y en la recopilación de cuentos «La vida en rosa». También escribió poemas, influido por la Generación del 27, dispersos en antologías, revistas y diarios. Su figura destaca, además, porque, durante la postguerra, llevó a término una intensa actividad de promoción de la cultura catalana a través de conferencias, colaboraciones en prensa, reuniones y lecturas clandestinas.

Nuevas salas
En el Museu de Mallorca se trabaja en las nuevas salas que se abrirán al público y que acogerán materiales dedicados a la protohistoria y arqueología clásica. Las que acojan las piezas referentes a Roma se centrarán en las manifestaciones hallados en el ámbito rural, comenta Rosselló Bordoy, «porque ya existe Pollentia y el Museo de Historia de la Ciudad». La distribución de las mismas se referirá a la protohistoria y la arqueología clásica. Y será la siguiente: dos salas dedicadas a la vida y la muerte en el talayótico final en Mallorca; otra resaltará el influjo de griegos y fenicios; en tres se expondrán materiales en los que se podrá apreciar el influjo romano así como la religión, vida y muerte. Por último, el mundo paleocristiano también estará también presente, comentó el director, «teniendo en cuenta que el gran museo de época paleocristiana es el de Manacor, de carácter municipal, y lo que debemos intentar nosotros es potenciar, no hacer sombra».