El Capítol tiene previsto derribar el segundo piso de la sacristía
de Sant Pere de la Catedral con el objetivo de ganar luminosidad en
el interior de la Seu. El canónigo y canciller, Joan Darder,
explicó que los arquitectos catedralícios, Sebastià Gamundí i Enric
Taltavull, ya han redactado el proyecto y que se está pendiente la
aprobación de la Comissió de Patrimoni para empezar las obras.
Darder añadió que «este segundo piso es un añadido posterior sin
valor patrimonial, una construcción reciente que no se utiliza para
nada y que, además, causa mala impresión en la fachada del Mirador.
No esperamos tener ningún problema para sacar adelante el
proyecto».
Esta iniciativa se enlaza con otras dos. La primera, la
recuperación del Portal del Mirador, tarea que se realizará el año
que viene. La segunda, la intervención de Miquel Barceló en la
capilla de Sant Pere. Según explico Darder, entre los meses de
septiembre y octubre está previsto que el Capítol se pueda
manifestar a favor o en contra del proyecto que el artista desea
realizar en la citada capilla.
El primer trabajo a realizar son las cinco vitrinas para dar más
luz al interior de la capilla. El derribo del segundo piso ayudará
a incrementar la luminosidad. El segundo trabajo correlativa a
éste, es la realización de algún relieve de terracota para
embellecer y terminar el conjunto de la capilla. Si esta segunda
fase se lleva a cabo, el actual retablo será cedido por el bisbado
a alguna iglesia por determinar ya que taparía parte de los
cristales que se harían. El coste de las obras ascendería a unos
500 millones de pesetas, de los cuales la Iglesia no pondría
ninguno, según Darder.
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