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J.NICOLAU Ocho monólogos en clave de humor del modernista Apel·les Mestres llegan al Teatre del Mar en un homenaje a la palabra. «El silenci és or» está protagonizado por Lluís Soler, Jordi Boixaderas y Lluís Carmona y, según su director, Frederic Rueda, es la paradoja que «una palabra vale más que mil imágenes aunque se hable durante una hora de su inutilidad».

El director puso de relieve la vigencia de estos textos, editados a principios del siglo pasado y actualmente muy desconocidos. A través de ellos, según Rueda, se muestra el talante humorístico del autor mediante un lenguaje «sencillo y surrealista pero fácil de entender».

«El silenci és or» fue estrenada en 1997 en la Fira de Teatre al Carrer de Tàrrega. En la obra, Lluís Soler asume el rol de «payaso serio» en contraposición al tono más desenfadado de Boixaderas, que aporta algunos «momentos delirantes y de humor inglés». Ambos actores están acompañados por el pianista Lluís Carmona, que ha compuesto piezas específicas para los intermedios entre monólogos y que se permite ciertas improvisaciones en el transcurso de los textos.

Lluís Soler agregó que «El silenci és or» es diferente en cada representación, en función de la simbiosis que tanto él como su compañero de reparto consiguen establecer con el público. «Nunca sabes cuándo empezará la complicidad con los espectadores», dijo Soler.