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El Capítol de la Seu presentó ayer la restauración de la Sala Capitular barroca de la Catedral, una joya de la arquitectura barroca realizada por el escultor navarro Francisco de Herrera y cuyas obras se iniciaron a finales del siglo XVII y terminaron a comienzos del XVIII. La presentación de las obras, que han permitido recuperar a esta sala todo el esplendor, corrió a cargo de Pere-Joan Llabrés, responsable de patrimonio del Capítol de la Catedral. Tal y como explicó ayer Llabrés, la sala tiene una forma elíptica, «un modelo importado de Italia, donde Francisco de Herrera se había formado».

Esta sala capitular se decidió construir en el siglo XVII pese a que en la Catedral ya existía una, de estilo gótico y atribuida a Guillem Sagrera, ya que «se quería que hubieran más recintos anexos a la nave central, por lo que se compraron unas casas próximas para construir estas dependencias», aseguró Llabrés, que añadió que «desde su construcción la sala barroca se convirtió en la única Sala Capitular de la Seu, siendo la gótica sólo de paso».

La sala está construida con piedra de marés de Llucmajor, muy bien labrada y esculpida. Lo más relevante de ella es una gran cúpula en cuyo centro está el escudo del Capítol, en el que se puede ver una Mare de Déu sentada en un trono con su hijo en brazos. También destacan las columnas y una capillita donde está la Veracruz, una de las más grandes del mundo. «Algunos estudiosos apuntan a que en esta sala se siente el horror vacui, ya que todos sus elementos están llenos de adornos», explicó Pere-Joan Llabrés.

El canónigo manifestó que «con esta restauración se ha recuperado el carácter primitivo». Así, se han retirado unos ángeles de madera que había adosados en la cúpula y que impedían que se contemplara en su totalidad. También se han retirado los damascos de terciopelo que forraban las paredes, así como unos tapices que Gaudí había retirado del altar mayor. Por último, se ha tenido que limpiar la piedra, que además de estar muy sucia contenía restos de cal, ya que había sido encalada a principios de siglo.

En cuanto a Francisco de Herrera, el creador de esta sala barroca, hay que decir que se puede ver numerosa obra suya en Mallorca. Él fue el autor del Portal Major de Sant Francesc o la capilla de Sant Nicolau, hoy llamada de Santa Rita, de la iglesia de los Socorrs, que actualmente está en periodo de restauración. Por lo que se refiere al autor de la restauración, Eudald Guillamet, ha sido también el encargado de la restauración en la Seu del sepulcro de Berenguer Batle, la persona que en 1346 consagró el altar mayor. También restauró el sepulcro del obispo Vilanova, la parte interior del portal mayor de la Catedral y el portal de la residencia de Sant Pere i Sant Pau.

Buscando financiación para el proyecto de Miquel Barceló
Pere-Joan Llabrés, encargado de patrimonio del Capítol de la Seu, aseguró ayer que el proyecto de Miquel Barceló para la Seu está a la espera de conseguir la financiación necesaria. Llabrés aseguró que el proyecto está aprobado y tirará adelante con los cambios que introdujo el Capítol. En este sentido, dijo que «he encontrado un texto de Gaudí en el que dice que en este tipo de obras ha de haber pocas letras».