Paco Morán: «Siempre trabajamos en función del público que tenemos»

-¿Cómo nació «¡¡Mamáaa!!»?
-Surgió tras hablar y reunirnos con los dos autores, Jordi Sánchez y Pep Antón Gómez. Tratamos varios temas sobre los que podría ir la historia como, por ejemplo, ser dos viudos o dos parientes. Al final, se les ocurrió hacernos hermanastros. En este caso, nos hemos cambiado los nombres. Yo soy Joan y Joan es Paco. En la obra, nuestra madre tiene 102 años y está a punto de morir y, nosotros, deseamos que fallezca para heredar. Joan necesita el dinero de la herencia y, Paco, también.

-El tema es un poco escabroso. ¿Cómo se consigue hacer reír?
-En un principio, estábamos un poco asustados. Pero, al final, utilizamos un vocabulario muy cauteloso, sin herir susceptibilidades. La gente mayor que viene a vernos se ríe más que los jóvenes.

-¿La improvisación sigue siendo clave?
-Sí, como siempre. Para mí, la improvisación significa colaborar con los autores. Las morcillas nacen cuando te sales de la comedia y aprovechas un acontecimiento o un personaje para hacer una broma barata y fácil. Nuestras morcillas vienen a cuento de lo que estamos haciendo en el momento en que improvisamos. Siempre trabajamos para el público que tenemos. Primero sale Joan y hace su monólogo y, después, yo. Según cómo reaccionan los espectadores, seguimos una línea u otra.

-La historia está escrita para ustedes, no se trata de una adaptación. ¿Narra su humor tal y como es?
-El actor se tiene que adaptar. Por ejemplo, cuando preparaba el papel de Walter Mathau para «La extraña pareja», no quería imitarlo pero, sin querer, hacía los mismos gestos que él porque le admiro. En esta ocasión, los personajes están hechos a nuestra medida.

-¿Es un reto tener como referente «La extraña pareja»?
-Siempre lo es. «La extraña pareja» fue un fenómeno que logró mantenerse casi seis años. «La jaula de las locas» y «¡¡Mamáa!!», sin embargo, han nacido con fecha de caducidad: dos años y medio o tres como mucho.

-¿Joan Pera y usted son como una pareja de hecho tras tantos años trabajando juntos?
-Sí. Además, vivimos muy cerca. Somos una pareja muy consolidada, nos admiramos y respetamos mutuamente. Me río mucho con él. Es un hombre con unas improvisaciones rapidísimas, como las mías. Por eso congeniamos tanto.