El Consell de Mallorca planea aprovechar la casa museo Llorenç
Villalonga, la de Blai Bonet y la del padre Ginard como grandes
centros dinamizadores y difusores de la cultura en la Part Forana.
«Ninguna perderá su carácter de casa museo ni dejará de estar
vinculada a las actividades que realizaban sus ocupantes, la
narrativa en el caso de Villalonga, la poesía en de Bonet y la
tradición e investigación folklórica en la del padre Ginard»,
afirmó Josep Lliteres, director insular de Cultura.
La propuesta del departamento de cultura todavía está en fase de
estudio, porque las disponibilidades presupuestarias son escasas.
«Tenemos pocos recursos y es muy probable que hasta 2005 la casa
museo de Blai Bonet no esté lista». Esta casa necesita reformas
para adaptarse a su nuevo uso, al igual que la del padre
Ginard.
La intención del CIM es aprovechar al máximo estas
infraestructuras de su propiedad para realizar muchas actividades,
ya que uno de los principales problemas que existen es la carencia
de espacios propios de este tipo en la Part Forana. Lo que sí está
claro es que se daría cobertura a un área muy amplia de la Part
Forana porque las ubicaciones de las diferentes casas museo
-Binissalem, Santanyí y Sant Joan- permitiría dar servicio a
comarcas muy extensas y a pueblos suficientemente alejados de
Palma.
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