NURIA ABAD16/12/04 0:00
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Tras un primer y exitoso recorrido por algunas de la canciones más célebres del repertorio italiano en «Cuore ingrato», el tenor catalán Jaume Aragall ha vuelto a contar con el sello Discmedi para ofrecer un nuevo testimonio de su capacidad artística en este género con «Voce e passione!», un disco dedicado más específicamente a la denominada canción napolitana.

Producido por el mallorquín Antoni Parera Fons y grabado por la Real Filarmónica de Galicia, bajo la dirección de Miquel Ortega, «Voce e passione!» ha requerido de Aragall «un esfuerzo superior que el de la lírica por el potencial de estas canciones, que va directamente al corazón».

El disco se abre con «Il mondo», probablemente una de las piezas de Jimmy Fontana más difundidas internacionalmente, y prosigue con «Parlami d'amore, Mariù», ya un clásico entre los cantantes de ópera que fue escrito en 1937 por Cesare Andrea Bixio.

También en este campo más popular, el tenor ha registrado la melódica «Al di là», con la que Carlo Donida ganó el Festival de San Remo en los años 60; «Dio, come ti amo», de Domenico Modugno, autor del famoso «Volare»; o «Caruso», del saxofonista y compositor Lucio Dalla. «Son canciones conocidas por todos y que en mi voz han encontrado una nueva vía de comunicación», dice Aragall, «porque la música no tiene fronteras si es de calidad».

Piezas más representativas de la canción napolitana son «Santa Lucia», escrita por Teodoro Cottrau en el siglo XIX y considerada históricamente como la primera canción de este género; o «Lolita», de Arturo Buzzi-Peccia, relizada ya para voz lírica.

Jaume Aragall canta asimismo «La strada», de Nino Rota, que sirvió de base a la película de Federico Fellini; así como «Passione» y «O paese do sole», que los famosos «tres tenores» (Carreras, Pavarotti y Domingo) han divulgado por todo el mundo.

En el mismo estilo, «Voce e passione!» incluye «Vieni», una invitación al amor de Enrico Carmelo; «Non ti scordar di me», pieza de Ernesto de Curtis también sólidamente enraizada en el repertorio de la canción napolitana; y, para cerrar el recital, la preciosa «Voce e notte».