El Museu d'Art Espanyol Contemporani (Fundación Juan March)
inauguró ayer la exposición «Gordillo: Dúplex», que reúne 57 obras
del pintor Luis Gordillo, considerado como el pionero de una de las
tendencias más significativas de la España de los años setenta, la
figuración madrileña. Las piezas, realizadas con técnicas muy
diversas entre 1964 y 2003, se exhibirán en Palma hasta el próximo
26 de marzo.
La selección de las piezas que componen «Gordillo: Dúplex» se ha
confeccionado desde el punto de vista de la repetición, tan latente
en la obra de este artista sevillano, una dosis de ironía que
Gordillo relaciona «con el hombre sometido a las tensiones de la
sociedad de consumo». Asimismo, en el discurso de la muestra se
observa con claridad como el artista evoluciona desde el
informalismo a la figuración y las nuevas fórmulas de la
abstracción postmoderna, así como su incursión no mimética en el
pop internacional. En este punto, su experiencia con el
psicoanálisis abrió nuevas vías y sentidos a su obra. «Fue un atajo
muy a propósito porque en todo artista es esencial el
autoconocimiento». Esta búsqueda supuso para el autor una
revelación, «un método para hacer codificar mis obsesiones en un
lenguaje que pudiera ser comprendido por los demás, la llegada a
las conclusiones última de la claridad».
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