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C. DOMENEC |BARCELONA

El psicólogo y catedrático de Filosofía, Gabriel Genovart, presentó en el pasado Saló del Llibre de Barcelona «La placenta de los sueños. Los mitos, los cuentos y el cine en la formación de la afectividad» (Lleonard Muntaner), versión castellana, revisada y completada, de la aparecida hace cuatro años en catalán. La obra cuenta con un prólogo de Román Gubern.

El libro empieza con el análisis de los paralelismos entre el cine y los cuentos de hadas. «Analiza los imaginarios colectivos de los cuentos y las viejas mitologías, y observa su presencia en la narrativa novelesca y la manera en la que llegan al cine», dijo Genovart. «Es una historia del significado del cine en la educación sentimental de las masas a lo largo del siglo XX». Películas clásicas, como «Rebeca», «Drácula» o «La noche del cazador» son analizadas en comparación a los mitos más antiguos. «En 'Rebeca' aparecen muchos cuentos populares como Blancanieves, Barbazul, el amor redentor, la suegra malvada o Cenicienta», y apuntó que «es muy interesante el capítulo dedicado a Drácula, que es una metáfora del cine, y que ya aparecía en las rondallas».

La comparación entre las producciones cinematográficas y la onírica sirve a Gabriel Genovart como punto de partida para explorar y reflexionar sobre los mitos adoptados por el cine. El autor afirmó que «el título del libro alude a la fuerza de la naturaleza, de la que surgen los sueños». Genovart incide en la noche, ya que «la oscuridad tiene un papel fundamental en los cuentos de hadas, que siempre deben contarse por la noche, como hacía Sherezade», y aseguró que «el cine no podría existir si en la oscuridad no hubiese vida».

Según Genovart, el volumen no es sólo un libro sobre cine, sino también sobre los cuentos de hadas, la rondallística o la psicología».