La consellera de Educació i Cultura, Bàrbara Galmés, apuesta en esta legislatura por un plan estrategia general en los temas de cultura. Así lo manifestó ayer en una rueda de prensa en la que anticipó las líneas generales de este departamento junto con el director general de Cultura, el escritor Pere Joan Martorell. A la espera de conocer los presupuestos para concretar las actuaciones de este plan estratégico, ambos destacaron que el planteamiento será «democrático y participativo», por lo que apuestan por un consenso entre las tres instituciones de gobierno, el Govern, los Consells y los ayuntamientos, y los agentes culturales.
Galmés enumeró los objetivos de la Conselleria, que serán «reforzar la cultura para que llegue a todos los sectores; fomentarla como herramienta de cohesión y participación, como elemento de progreso y como apuesta social». Para conseguir estos objetivos, la consellera señaló que «es necesario llegar a un entendimiento y a un consenso con todos los sectores». Por ello, apostó por crear un Consell de les Arts i la Cultura que marque las pautas de actuación. Los propósitos de este consell serán «potenciar e impulsar los jóvenes creadores, poner especial atención en la red de museos, los archivos y las bibliotecas y fomentar la lectura». En este sentido, Martorell cree necesario la creación de la figura del delegado de los museos, los archivos y las bibliotecas, tal y como solicitan los responsables de estos espacios.
En relación con la intención del Ministerio de Cultura de ceder la titularidad de los museos a las Comunidades Autónomas, está pendiente una negociación con el Gobierno central, que el nuevo ministro, Antonio Molina, ha asumido.
En cuanto al fomento de la lectura, «una apuesta personal mía», dijo Galmés, anticipó una de las actuaciones que se llevarán a cabo y que consistirá en solicitar a autores isleños cuentos o narraciones cortas para editarlos en publicaciones de bolsillo y repartirlos en el transporte público.
Para llevar a cabo todas estas líneas de actuación que adelantó, «no se puede improvisar, se deben estudiar los modelos y después organizarlos», señaló la consellera, quien aventuró que, seguramente a partir de otoño o a finales de año, estarán planificadas.
Sobre la feria Art Cologne, que se celebrará el próximo mes de septiembre en Palma, la consellera explicó que están pendientes de reunirse con los responsables de la misma para valorar el proyecto, que, en principio, está cerrado por el anterior Ejecutivo para cuatro años, y revisar también el convenio.
Acerca de la restauración de sa Llonja, cuyo proceso de selección de la empresa que realizará las obras comenzó ayer, Martorell dijo que durante el tiempo en que se prolonguen las mismas se intentará potenciar los museos, los archivos y las bibliotecas como lugares para acoger las exposiciones que se tenían previsto mostrar en este edifico gótico.
Aunque ya se han perfilado las líneas generales, después de tan sólo un mes en el cargo todavía es pronto para conocer las diversas actuaciones que llevará a cabo esta Conselleria. Todo está pendiente de valorar y de analizar. Es el caso de la inclusión de nuevo de Balears en el Institut Ramón Llull. El reparto de competencias está a la espera de la reunión del president del Govern, Francesc Antich, y el presidente de la Generalitat, José Montilla.
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