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MARIANA DÍAZ
El Castell de Bellver ya tiene plan de emergencias, el primero de su historia como espacio abierto al público, que fue aprobado ayer en la Junta de Gobierno tras ser «trabajado durante meses» conjuntamente entre la Policía Local y el personal del castillo, según explicó ayer a este diario Nanda Ramon, concejala de Cultura de Cort.

Ramon apuntó que el personal del castillo ha recibido formación específica y que antes del verano se hicieron «simulacros» de distintas situaciones susceptibles de suceder en un lugar que recibe anualmente a 310.000 personas. A partir de este momento, el castillo, cumpliendo la Llei de Museus, dispone de un protocolo de emergencia y en el plan se especifica que «se ha de tener como mínimo una plantilla permanente de cuatro personas para afrontar una emergencia con garantías».

El plan no afecta a la Torre de l'Homenatge «porque está cerrada al público» y si se abriese «se debería elaborar un protocolo específico» dada su «peculiaridad».