Durante la mañana de ayer la Fira del Llibre tuvo un número de asistentes muy elevado. | Jaume Morey

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A pesar de que la XXVIII Fira del Llibre lleva únicamente dos días en activo en es Born, las primeras impresiones de los libreros en estas dos jornadas son positivas, al igual que en la edición anterior. Si bien la mayoría de las librerías coinciden en que la crisis no esta afectando especialmente, si cuentan que a la hora de comprar se lo piensan más. Lo más demandado es el libro del bolsillo, mientras que el género narrativo que más se está vendiendo es la novela y prima la lectura en castellano, siendo El asedio, de Arturo Pérez-Reverte, y En la ciudad sumergida, de Jose Carlos Llop, los bestsellers por excelencia. A pesar de ello, autores en lengua catalana como Sebastià Alzamora, con su Miracle a Llucmajor, y el Egosurfing de Llucia Ramis, figuran entre los más leídos.

Aunque todavía es pronto para hacer balance, en los estands de las librerías no dejan de entrar personas, algunos curiosos que pasean y otros que saben perfectamente lo que quieren. Librerías como Quart Creixent, Llibres Mallorca o Literanta manifestaron que tienen las «mismas expectativas que el año pasado», mientras que otras como Born, Quars y Embat han notado una subida en la asistencia y en las ventas, «esperamos mejores resultados que en la anterior Fira», coinciden.

Destacan también otros géneros narrativos como los libros sobre conocimiento de ciencias y literatura selectiva como es el caso de la Biblioteca de Babel, nueva incoporación de la edición y que propone «otro tipo de libros, como literatura iraní o norteamericana». Por otra parte, las ventas de libros infantiles continúa dando buenos resultados, como es el caso de la librería Baobad, en la que se estan vendiendo muy bien los libros de Geronimo Stiltom o de personajes de la televisión como Pocoyó o Patito feo.


Paseando entre libros

Entre los paseantes y compradores que se pueden ver por es Born, destaca un perfil de comprador joven que busca libros especificos. Este es el caso de Marta Riutor, estudiante de 23 años que «no me pierdo la feria desde hace dos o tres años, soy una amante de los bestsellers y de sagas como Crepúsculo». Lo mismo le ocurre a Marina Ramis, a la que le «encantan la literatura catalana, ahora acabo de comprar He jugat amb els llops, de Gabriel Janer Manila, y Miracle a Llucmajor, de Sebastià Alzamora». Por otra parte, encontramos visitantes sin ánimo de gastar, como es el caso del empresario Javier Fernández, de 38 años, que declara que «es final de mes y la economía está muy mal».