«El año pintaba oscuro y complicado, pero tenemos un excelente festival», ha destacado hoy en la presentación del ciclo el promotor musical Roberto Menéndez, impulsor junto con Gerardo Cañellas del Jazz Voyeur, que este año concentrará siete de sus ocho conciertos en el Teatro Principal de Palma.
«Ojalá el Teatro Principal sea nuestra casa en el futuro», ha incidido Menéndez, que ha recordado que durante las seis ediciones anteriores el festival ha estado «peregrinando» por diferentes espacios escénicos de Mallorca.
La programación la abrirá el próximo 3 de julio la cabaretera Lemper, que presentará el espectáculo «Ultimo tango en Berlín», en el que mezcla piezas de su amado Kurt Weill, de Edith Piaf y Jacques Brel, y del tanguista argentino Astor Piazzolla, algunas de las cuales cantará, por primera vez, en español.
Tras un largo paréntesis, el ciclo proseguirá el 13 de octubre con los Campbell Brothers, conjunto de gospel-blues cuyo sonido se caracteriza por el empleo de las guitarras de pedal ("pedal steel"); y el día 17 del mismo mes el protagonismo será para el percusionista cubano Horacio «El Negro» Hernández y su trío Italumba.
El 9 de noviembre, el joven trompetista de Nueva Orleans Christian Scott presentará al frente de su quinteto la mezcla de jazz, hip-hop y rock que le ha hecho uno de los más prometedores solistas de los últimos años.
The Bad Plus, el trío de configuración clásica (piano, bajo y batería) que aborda con espíritu vanguardista temas pop y rock para impulsar un nuevo «standard» jazzístico, actuará el día 10 de noviembre.
El 18 de noviembre se celebrará el único de los conciertos que no acogerá el Teatro Principal, el que brindará en el Conservatorio de Palma el quinteto del veterano trompetista Tom Harrell, que acumula discos y galardones en una dilatada carrera.
El ciclo proseguirá el 15 de diciembre con un recital de homenaje a Chopin a cargo del trío que lidera el pianista polaco Andrzej Jagodzinski y concluirá el 20 de ese mes con la actuación del coro de gospel Spirit of New Orleans.
Gerardo Cañellas ha hecho hincapié en que Jazz Voyeur 2010, cuyo cartel ha creado el pintor Rafa Forteza, se completa con clases magistrales de algunos de los músicos contratados, un concierto de intérpretes sardos en colaboración con el festival Jazzin' Cerdeña y un breve ciclo de cine sobre la «Nouvelle Vague».
El festival mallorquín cuenta con una aportación de 100.000 euros de la Conselleria de Turismo y Trabajo, cuya titular, Joana Barceló, ha subrayado la relevancia de una buena oferta cultural para atraer turistas, especialmente en temporada baja, y ha incidido en la necesidad de que los eventos estén cerrados con un año de antelación para que el Govern los promocione en las ferias internacionales.
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