Paco de Lucía, maestro de maestros y precursor de la fusión del flamenco contemporáneo, actúa mañana en el Auditòrium de Palma. | Teresa Ayuga

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Paco de Lucía recala en Palma con la gira Cositas Buenas a cuestas. Revolucionario de las seis cuerdas, regresa a la tierra que ha elegido para vivir con su familia. La cita con el artista es el sábado 2 a las 22.00 horas, en el Auditòrium de Palma.

El flamenco más ortodoxo guió sus inicios musicales, que evolucionaron hacia una reconversión que abrió su música a otros géneros como el pop, el jazz o el rock, convirtiéndole en el precursor de un flamenco anguloso y mestizo. También resulta exquisita su noción visionaria, como introductor del cajón de acompañamiento a la guitarra española. Siete artistas acompañarán al gaditano sobre el escenario, entre ellos el cantaor Duquende y el bailaor Antonio Fernández Montoya 'El Farruco'.

-Sarajevo, Belgrado, Estambul... Su gira es un auténtico tour transcontinental, ¿qué diferencia a estos públicos del español?

-Frente a idénticas situaciones el género humano reacciona de igual forma. Con la música pasa exactamente lo mismo, y más teniendo en cuenta el modo en que nos ha alcanzado la globalización.

-Usted demostró que el flamenco puede congeniar a la perfección con el pop, el jazz o el rock...

-La música son doce notas y todos los músicos tocamos esas mismas notas, lo único que difiere es que cada uno las interpreta al servicio de su propia educación musical. Por supuesto que el flamenco es compatible con otros géneros, aunque por encima de todo soy un intérprete de flamenco, no me veo como un rockero.

-¿Qué sensaciones le transmite el concierto del sábado en Palma?

-Es un concierto especial ya que resido en Mallorca. De ese modo, una parte importante del público concentrado serán amigos. De algún modo me perturba conocer al público frente al que toco. Considero a Mallorca como mi otra tierra y esta vez el concierto no será como otros en los que, citando a Chaplin, puedo contemplar al público «como un monstruo de mil cabezas», próximo pero ajeno a mí.

-Como artífice de la internacionalización del flamenco, ¿lo considera nuestro género más representativo?

-Es una música con un enorme peso en el mundo, existen cinco o seis géneros esenciales en la música y, sin lugar a dudas, el flamenco es uno de ellos. De todos modos, puedo entender que un mallorquín, vasco o catalán no se sienta representado, aunque esa circunstancia no niega su gran resonancia en la cultura musical mundial.

-A nivel artístico, ¿qué le aporta su residencia en la Isla?

-Paz, que es lo que llevo buscando desde que era niño. La paz que se respira en este lugar resulta óptima a la hora de componer. También destacaría el clima y la comida. Llevo una vida de mucho ajetreo en la que el personaje que represento no se corresponde en absoluto con mi auténtica esencia, no va conmigo. En una vida de viajes y trasiego constante, un lugar como Mallorca me hace mucho bien.

-¿Cuándo lanzará nuevo material discográfico?

-Pronto lanzaré un álbum con nuevas canciones basadas en la copla, puede que en 2011. Mientras tanto vamos a grabar todos los conciertos de esta semana para recopilar material con el que confeccionar el álbum en directo que lanzaré en breve.

Paco de Lucía. Sábado 2 de octubre, a las 22.00 horas. Auditòrium de Palma. Precio de la entrada: entre 70 y 110 euros.