«Una exposición de arte contemporáneo con un punto clásico». Eso es lo que ofrece Mirades creuades en Caixafòrum de Palma, una colectiva repartida en dos plantas con obras de 37 artistas, principalmente europeos, que se inauguró ayer y se podrá ver hasta el 5 de enero.
La muestra es el resultado del acuerdo que la Fundació La Caixa firmó en 2010 con el Museu d'Art Contemporai de Barcelona (MACBA). Por ello la presentación de ayer contó con el director de la fundación, Ignasi Miró, y el de MACBA, Bartomeu Marí, además de la directora del Caixafòrum de Palma, Margarita Pérez-Villega.
«Creamos una exposición que hable de la abstracción y el realismo», explica la comisaria de la exposición, Nimfa Bisbe. «Es un dialecto muy antiguo en temas artísticos, y queríamos ofrecer una muestra que abarcara una parte».
Con este propósito, la primera planta del Caixafòrum acogerá las obras de artistas como Brassaï, Ángel Ferrant o Lucio Fontana, todas ellas creadas en los años 50 y 60, salvo un cuadro de Miró de 1925, «quien inspiró a otros artistas de la exposición, como Antoni Tàpies», y algunas fotografías, una de ellas tomada en Mallorca, de Robert Frank, el único artista de la planta que no es europeo. «La muestra recoge el arte de la postguerra» y un filme de Joan Colom, rodado en los años 60, cierra con su visión de las calles del barrio chino barcelonés el primer piso.
Por otro lado, la planta baja se ha adecuado para coger las obras de los años 80 y 90, «tras la crisis de los años 70, las piezas tienen un gran valor visual». En ella se podrán ver lienzos de gran formato de artistas como Miquel Barceló o las fotografías «austeras» de Anselme Kiefer o Craigie Horsfield.
Mirades creuades. En el CaixaFòrum de Palma (Pl. Weyler, 3). Hasta el 5 de enero.
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