Músicos y ciudadanos se manifestaron ayer frente al Ajuntament de Palma.

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El apoyo a la continuidad de la Orquestra Simfònica es una constante. Ayer, frente al Ajuntament de Palma, se presentó en sociedad la Plataforma per Sa Simfònica, una asociación de ciudadanos que defiende «la continuidad de la orquesta con un presupuesto igual al del año 2011 y sin reducción de plantilla». El portavoz de la plataforma, Miquel Mascaró, explicó que es un problema «que viene de fuera, del Govern Matas. Y ahora este gobierno se radicaliza y quiera acabar con la Simfònica».

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La Plataforma per Sa Simfònica, formada por 104 compromisarios y secundada por el Consell de la Societat Civil y la Plataforma de Mareas Ciudadanas, ya ha reunido más de 4.000 firmas de apoyo a la orquesta. «Pensamos que ni los trabajadores -en referencia a los músicos- son unos privilegiados, ni tampoco la orquesta es un privilegio para la ciudad. Es lo que toca, no es un lujo. Es una necesidad», afirmó Mascaró, antes de dar paso a Miriam Rader, quien fue músico de la Simfònica hasta hace diez años.

«Hemos creado la plataforma de ciudadanos y pienso que sólo la opinión pública tiene influencia sobre lo que los políticos van a decidir». Cabe recordar que los músicos aún no han cobrado la nómina de junio y «desconocen su futuro», no hay director titular y, tal y como recordó Rader, «la gerencia ha cancelado todos los conciertos que estaban previstos». La formación reclamó el pasado viernes la dimisión de su gerente, Marcelino Minaya, por «su gestión caótica».