Grabados, cerámica, pintura, vídeo proyecciones y, como novedad de este año, microteatro, además de escultura y arte contemporáneo en general a través de otras disciplinas, tomaron ayer Inca en una nueva edición del Incart, la octava. Incart se podría definir como un itinerario artístico a través de espacios públicos y privados, desde galerías hasta locales de restauración, de la ciudad.
A las ocho de la tarde se inauguraron las exposiciones oficialmente. Este año participan 10 espacios, pero se expone obra de más de 40 artistas.
Aina Cortès, Antoni Ferragut, Ferran Aguiló y Ángel Pascual expusieron en las salas del convento de Sant Domingo. Abajo, en el claustro, se representaron piezas de microteatro de la mano de la compañía Idealogia.com, y se proyectó una obra que firmó Blanca Alonso y Sofà interpretó sus canciones. Destacaremos que para la actuación de Sofà se dispuso simbólicamente un antiguo sofá del Teatre Principal local, el que deberá convertirse en el gran espacio escénico de la ciudad.
A unos 300 metros del convento, en el Centre de Cultura Sa Quartera, el pintor y escultor Luis Maraver presidía la inauguración de una exposición de su obra de gran formato titulada Urbà. Allí, entre los cuadros de ciudades de Maraver vimos a otros artistas, como a Pep Roig, o José María Rodríguez, peso pesado del PP de Palma, y también al juez José Castro.
Se da la casualidad de que Castro instruye el llamado caso 'Over', aquel por el que se imputó a Rodríguez y al actual alcalde de Inca, Rafel Torres.
Volvamos al arte. Otra novedad de Incart fue la instalación, en la Plaça d'Espanya, de un mercadillo en el que se pusieron a la venta obras de formato pequeño como cerámicas. A pocos metros de la plaza, en el casal de Cas Metge Cifre, una decena de fotógrafos compartía espacio con escultores como Coll Bernat. En Sa Galeria de Can Marc, otro espacio que por primera vez se sumaba a Incart, el cantautor de Manacor Miquel Serra ponía música a una muestra de collage a cargo de Jaume Serra. Y un largo etcétera de exposiciones que se podrán visitare hasta el 21 de junio.
Incart lo organiza la asociación Inquietart, pero cuenta con el impulso y el apoyo del Ajuntament. En este sentido, y con el objetivo de dinamizar la ciudad, el Consistorio pone el énfasis en los menús que los reputados cellers de la ciudad sirven a propósito del evento. En esta ocasión participaron una docena.
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