Tomeu Morey da color a esta icónica imagen de Batman, el hombre murciélago.

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La historia de Batman, que ayer celebró en Estados Unidos su 75 cumpleaños, tiene también su pincelada isleña. En Mallorca y en los últimos seis años, dos artistas, Guillem March y Tomeu Morey, han dibujado para el mercado americano diversos álbumes y portadas sobre el popular hombre murciélago y otras series ambientadas en Gotham. La factoría DC Comics ha apostado por ellos para importantes proyectos: el relanzamiento el año pasado de su serie «estrella», Detectives Comics; o el más reciente, la serie semanal Batman Eternal.


Sus trabajos, que en España distribuye ECC Edicions, ofrecen «un estilo diferente a lo que se puede encontrar en el sector americano, menos frío en el color, y menos estático y plano en las tintas», valora Morey, que en Estados Unidos trabaja únicamente como colorista. Entró en DC un año después de Guillem March y desde entonces ha firmado 1.500 páginas, algunas con Tony Daniel, Kemeth Rocafort, Ivan Reis o Jason Fabok . Sin embargo, con March ha ofrecido un trabajo muy especial. «Es algo nuevo respecto a otras series de Batman, las líneas son muy expresivas y vivas, y el color ofrece un aspecto más manual, aunque realmente es digital».

El histórico personaje sigue siendo todo un fenómeno. De hecho, 75 años después de su nacimiento se siguen produciendo películas sobre Batman. En 2016 llegará a la taquilla Batman & Superman: Dawn of justice y DC tiene previsto publicar en octubre una enciclopedia o libro definitivo sobre el caballero oscuro, cuya portada lucirá los colores de Tomeu Morey. «La verdad es que está muy bien que te encarguen la primera portada de las nuevas series, es un reconocimiento importante», asegura. Del primer número de Detectives Comics, también con participación del mallorquín, se vendieron 300.000 ejemplares. «Es su publicación más icónica, la más vendida de la historia de la editorial».

Color

Para pintar a Batman «hay que centrarse en crear un ambiente y dar con el color narrativo que se adapte al guión y ayude a contar la historia». Tratar con un personaje histórico tiene ciertas limitaciones artísticas. «El traje está definido, pero cada uno puede darle personalidad con su estilo gráfico».
Así, a más de 6.000 kilómetros de distancia, la que separa Mallorca de Estados Unidos, se gestó un Batman con pincelada isleña.