Esta propuesta de declaración BIC se elevará para su votación en el pleno del Consell de Mallorca, que es el órgano competente para su aprobación definitiva.
La declaración de bien de interés cultural afecta, por un lado, a 125 pinturas del fondo de arte de Sa Nostra fechadas desde el siglo XVI hasta mediados del XX y, en segundo término, a la colección de numismática de la entidad formada por 484 monedas que abarcan todos los períodos culturales históricos de Baleares y las Pitiusas.
En cuanto a la colección pictórica, integrada por más de un centenar de pinturas, dibujos y obra gráfica, el valor radica en que es una colección clave para explicar el arte en las islas, especialmente en Mallorca entre el siglo XIX y la primera mitad del XX.
A ello se suma la calidad individual de muchas de las piezas y la representación de figuras y espacios claves en la historia, como el rey Jaume o visiones históricas de la ciudad de Palma.
Se trata, según el Consell, de en una colección «incomparable», lo que la hace merecedora de la máxima protección de la Ley 12/98 del patrimonio histórico de las Islas Baleares.
El estado de conservación de las piezas, en general, es bueno ya que muchas han sido restauradas o, como mínimo, tuteladas por la entidad.
En cuanto a la colección de numismática de Sa Nostra, el valor se encuentra en el alto número de acuñaciones realizadas en Baleares.
La declaración como bien de interés cultural implica una serie de medidas de protección: se debe mantener la unidad de las dos colecciones y deben salvaguardarse en un espacio con las condiciones adecuadas para su correcta conservación.
Cualquier intervención de conservación o restauración que se tenga que llevar a cabo en las piezas que forman parte de ambas colecciones necesitan la autorización previa de la Comisión Insular de Patrimonio Histórico.
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