Armengol constató que «tenemos un compromiso con Catany que ya estamos en disposición de alcanzar. Hacer realidad este espacio es lo que merece su legado». «Estamos ante una realidad más de esta legislatura», aseveró la presidenta del Ejecutivo balear, quien añadió que la obra de Catany es de «un valor inmenso y determinante» para la formación de nuevos fotógrafos que, «como él, continuarán interpretando la realidad y profundizando en la utilización de materiales y técnicas».
Según la presidenta, con «la mirada puesta en el futuro» se ponen las bases materiales de un centro que «tiene todos los ingredientes para convertirse en un espacio de referencia para la fotografía».
Por su parte, la consellera de Cultura, Fanny Tur, remarcó que, tal como se comprometieron «hace un año y medio», este proyecto es «una de nuestras prioridades» y «uno de los objetivos estratégicos del Pla de Cultura». Según especificó, «las obras han comenzado antes de acabar el año y tenemos 2019 para cumplir con este compromiso».
«En dos años y medio se habrá encarrilado un equipamiento para poner Llucmajor como capital internacional de la fotografía», sostuvo.
Las actuaciones preliminares para la adecuación del espacio, con el derribo de paredes y desbrozado del solar, tendrán un plazo máximo de ejecución de un mes. La obra estará ejecutada por el estudio Mateo Arquitectura, dirigido por Josep Lluís Mateo. El centro estará formado por tres inmuebles: las casas de Catany y el fotógrafo Tomàs Monserrat, así como sa Trinxa.
En el Centre Internacional de Fotografia Toni Catany se conservará su archivo y colección, que cuenta con una 100.000 diapositivas y negativos, y 2.000 fotografías positivadas, además de cerca de 300 obras de fotógrafos contemporáneos que forman parte de su colección particular. También el fondo fotográfico de Tomás Montserrat (Llucmajor, 1973-44), cámaras antiguas y una biblioteca. La obra ocupará una superficie de 1.625 metros cuadrados construida y su presupuesto es de 2,4 millones de euros, procedentes de los fondos estatutarios de 4,3 millones de euros que vencían a finales de 2018.
En este encuentro institucional también participaron representantes del Ajuntament de Llucmajor, además de Toni Garau, director de la Fundación Toni Catany.
Durante la visita, las autoridades recibieron pinceladas y detalles de los responsables de Tragsa, empresa a la que se ha hecho el encargo de gestión de las primeras intervenciones in situ.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Emhorabuena. pero sigue existiendo una nube que preveo acabará en los