Una escena de la ópera ‘L’elisir d’amore’, que se estrenó este domingo en Palma. | M. À. Cañellas

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Este ha sido un domingo especial, diferente. Los comicios del 28-A acapararon la jornada, aunque algunos, más bien muchos, optaron por un antídoto para librarse del aluvión de noticias y comentarios en torno a los resultados de estas esperadas y controvertidas elecciones generales: la ópera. El Teatre Principal de Palma se anotó este domingo un nuevo tanto en la que ya es una de sus temporadas de ópera más exitosas con el estreno de L'elisir d'amore, un «lleno técnico», tal y como relataron desde el espacio escénico de la calle Riera, que aunque no pudo superar la arrolladora respuesta de Madama Butterfly, se saldó con una asistencia excelente. El montaje, que dirige en escena José Martret –en el que es su debut en este campo–, y con Yi-Chen Li –ya aplaudida antes en el Principal por Le nozze de Fígaro– llevando la batuta musical, se representará también esta misma semana, los días 1, 3 y 5 de mayo.

L'elisir d'amore, de Donizetti, es como un cuento, una comedia romántica con un fuerte «aroma mediterráneo», como explicó Martret en la presentación de esta ópera, en la que un hombre joven se enamora de una mujer que le rechaza, por lo que él va a la búsqueda de elixir que haga que ese enamoramiento cuaje. Esta joven pareja protagonista está encarnada por los jovencísimos Xabier Anduaga y Sara Blanch. El reparto lo completan el barítono catalán Joan Martín Royo –en el papel de Belcore–, el barítono menorquín Simón Orfila, como Dulcamara, y la soprano mallorquina Irene Mas, en el papel de Gianetta.

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Vestuario

Otro punto fuerte de la obra es su vestuario, que ha diseñado el reconocido Lorenzo Caprile, mientras que la iluminación lleva la firma de David Picazo. Mientras, la música corrió a cargo de la Orquestra Simfònica de les Illes Balears y el Cor del Teatre Principal, dirigido por su titular, Pere Víctor Rado.