LaFundació Pilar i Joan Miró está trabajando en «un protocolo más específico para la salvaguarda y protección de las obras de arte» a raíz de los citados actuaciones destructivas, según informa su director, Francisco Copado. Aunque no ha querido desvelar muchos detalles, precisamente por una cuestión de seguridad, sí explica que los objetivos son minimizar los riesgos, proteger las obras y tener una capacidad de actuación rápida, en el caso de que llegue a producirse algún incidente. En este punto, ha reconocido que «el riesgo cero no existe». Copado destaca que la Fundació «ya cuenta con un protocolo de seguridad y emergencias» y puntualiza que el que se está elaborando ahora es más específico para impedir actos vandálicos. Por citar algunos ejemplos, no se puede acceder con mochilas grandes, aunque sí pequeñas; tampoco se puede entrar con comida y bebida.
En Sa Bassa Blanca ya han tomado medidas. Su responsable, Kika Osorio, anuncia que se han prohibido todo tipo de mochilas; hasta ahora estaban permitidas las más pequeñas. Además, se va a limitar el aforo. Precisamente, reconocen desde el centro, esta semana ha habido una reunión de formación con el personal de sala.
Por su parte, la directora del Museu de Mallorca, Maria Gràcia Salvà, tiene claro que «no está preparado ningún museo del mundo; todos estamos expuestos». No obstante, avanza que van a proponer la instalación de un arco de seguridad con la finalidad de evitar la entrada de objetos metálicos y punzantes. Además, avisa que en el Museu «no dejamos entrar a nadie con mochila ni con bolso grande, por lo que es difícil que entren botes de pintura. También cuentan con ordenanzas de sala en cada planta expositiva. Asimismo, aprovechando la finalización del contrato de seguridad, han pedido reforzar la seguridad con un guardia.
Asimismo, Salvà recuerda que existe el síndrome Stendhal -también denominado síndrome de Florencia o estrés del viajero-, que consiste en una enfermedad psicosomática que causa un elevado ritmo cardíaco, temblor, palpitaciones, vértigo y confusión cuando el individuo es expuesto a obras de arte, especialmente cuando estas son consideradas extremadamente bellas. En este punto, expresa su preocupación por el hecho de que la publicación de noticias de acciones que atentan contra el arte puedan impulsar este tipo de conductas.
Imma Prieto, directora de Es Baluard Museu d'Art Contemporani, asegura que cuentan con «todas las medidas de seguridad, protocolos, personal y seguros para su correcto funcionamiento». En este sentido, precisa que «las medidas de seguridad están pensadas para controlar los aforos habituales, asumiendo que las personas que vienen al museo están interesadas en sus contenidos». No obstante, matiza que «se podría contemplar una ampliación de la seguridad cuando hay una actividad extraordinaria, pero esto que ha pasado no es una actividad extraordinaria: es vandalismo y es imprevisible».
A su modo de ver, «lo que también denotan estas actuaciones es la gran confusión y la falta de información y conocimientos que demuestran estas personas, confundiendo lo que es patrimonio, legado, memoria e identidad territorial con un problema medioambiental, que no se soluciona atacando una obra de arte. Lo que hacen es atentar contra un periodo de la historia y es igual de grave que cuando los talibanes tiran una bomba delante de las ruinas budistas».
Desde Can Prunera también muestran su preocupación por los hechos que están sucediendo en diferentes museos y reconocen estar «consternados». No obstante, aseguran que están «bastante tranquilos» con los cuadros que albergan porque las obras más famosas, tales como las pertenecientes a Picasso y Miró, son de papel y tienen un cristal que las protege. En este sentido, apuntan que «los óleos son más fáciles de recuperar».
Otros de los centros más importantes de la Isla, el Museu d'Art Sacre de Mallorca y la Catedral, manifiestan que «contamos con los protocolos de seguridad pertinentes. Además, aclaran que cuentan con cámaras de vigilancia y guardias de seguridad, tanto propios (internos) como privados (externos)».
En definitiva, algunos museos de la Isla ya han comenzado a tomar medidas con la finalidad de evitar que se cometan actos vandálicos, tal y como ya ha sucedido en otros países.
Imposible evitarlos? Basta prohibir que la gente entre con mochilas y bolsos. Que se guarden a la entrada y se devuelvan al salir. Lleváis años prohibiendo...una cosa más, no se notaría.
Vamos a ver. No descarto que un vándalo entre al museo y atente contra una pbra.
Pero lo que hemos visto estos días me da a mi que es una campaña de marketing.
Justamente en esos museos se pasa por un arco, las pertenencias se pasan por un scanner, así que es muy complicado entrar frascos de pintura, sopas...
Además, qué casualidad que cuando se atenta hay por los menos 5-10 fotógrafos para inmortalizar el evento y dos o tres tipos con las latas en las manos esperando que les den la orden. Y me van a decir a mi que no hay cerca un guardia que los expulse? Porque intenta tu tocar el cordón de seguridad que protege una obra o acércate demasiado a hacer una foto y ya tienes a cuatro seguratas detrás de tí invitándote a alejarte o incluso salir del museo.
Hay que ser mononeuronal, y seguir a las masas…. ¿Nadie tiene personalidad y es capaz de pensar por si mismo??? ¿Hay que seguir a las masas??? Lo dicho:
Solo deben tener una neurona, no dan para más
5 comentarios
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Hay que ser un tarado/da mental para atentar contra una obra de arte. Estas acciónes les descalifica para defender cualquier opción u opinión
Título de la película: "La desculturización global acompañada del talibanerismo"
Imposible evitarlos? Basta prohibir que la gente entre con mochilas y bolsos. Que se guarden a la entrada y se devuelvan al salir. Lleváis años prohibiendo...una cosa más, no se notaría.
Vamos a ver. No descarto que un vándalo entre al museo y atente contra una pbra. Pero lo que hemos visto estos días me da a mi que es una campaña de marketing. Justamente en esos museos se pasa por un arco, las pertenencias se pasan por un scanner, así que es muy complicado entrar frascos de pintura, sopas... Además, qué casualidad que cuando se atenta hay por los menos 5-10 fotógrafos para inmortalizar el evento y dos o tres tipos con las latas en las manos esperando que les den la orden. Y me van a decir a mi que no hay cerca un guardia que los expulse? Porque intenta tu tocar el cordón de seguridad que protege una obra o acércate demasiado a hacer una foto y ya tienes a cuatro seguratas detrás de tí invitándote a alejarte o incluso salir del museo.
Hay que ser mononeuronal, y seguir a las masas…. ¿Nadie tiene personalidad y es capaz de pensar por si mismo??? ¿Hay que seguir a las masas??? Lo dicho: Solo deben tener una neurona, no dan para más