¿Puede la cultura mejorar la calidad de vida de los pacientes en un hospital? La respuesta es un rotundo «sí» por parte de la gestora cultural Inés Enciso. La experta recalará este martes en Palma para ofrecer una charla en Can Campaner, 4, de Palma, para la Reial Acadèmia de Medicina de les Illes Balears (RAMIB), a las 19.00 horas, bajo el título La cultura como elemento de transformación.
Enciso forma parte de un equipo de trabajo que ha puesto en marcha un proyecto en el Hospital Infantil Niño Jesús de Madrid, que es una «referencia» en este campo, llamado Yo Cuento. «Lo que hacemos es medir científicamente el impacto que tienen las terapias medicas enfocadas en las artes, en este caso las artes escénicas y audiovisuales, en patologías neurológicas, que es nuestro campo», detalla. «Son patologías difíciles de tratar sobre desde las terapias médicas y tienen que ver con la autoestima, la percepción, la expresión, y los resultados son realmente asombrosos, en algunos aspectos son determinantes». Además, sostiene, este tipo de terapias hacen que, a través del arte, se «humanicen» espacios a priori «fríos y complejos, en ocasiones con mucho dolor y situaciones difíciles, como pueden ser los hospitales». Más todavía «cuando hablamos de centros pediátricos».
Novedoso
Su proyecto es «novedoso y se lleva trabajando desde hace algunos años, pero es verdad que tenemos la sensación de que muchas terapias enfocadas en la cultura no se realizan de manera ordenada, y ahora hemos conseguido una ayuda de una fundación para poder investigar en el hospital sobre la figura del mediador artístico, alguien que coordine y sobre todo dirija de manera ordenada todas y cada una de las propuestas artísticas que se van realizando, cada vez son más los artistas que están comprometidos con este trabajo en centros hospitalarios, pero todavía queda mucho por hacer para asentarlo».
Y pese a los avances que suponen este tipo de terapias con los más pequeños, «en algunos casos se ha mejorado muchísimo a nivel autoestima, prejuicios y estigmas, incluso la expresión», es necesaria la colaboración privada para poder desarrollar estos proyectos. En el caso de Yo Cuento, entidades como CaixaBank y Netflix. «Estuvimos en los estudios de Netflix, viendo los platós de rodaje, fue una experiencia para ellos, grabamos un cortometraje, lo pasaron muy bien». Su labor, además, ha recibido aplausos de la reina Letizia, «que vino a conocer nuestro trabajo y a los niños y niñas». De hecho, los ‘peques' incluyeron esa visita ‘real' en el citado cortometraje en Netflix.
La repercusión de Yo Cuento ha llegado incluso al otro lado del mundo, hasta el Centro Hospitalario Pereira Rossell de Montevideo, donde también «están trabajando en esta línea», por lo que «no podemos estar contentos», concluye Enciso, que visitará la Isla, un lugar que conoce, «en Mallorca viven familiares y voy siempre que puedo».
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