Toni Lluís Gili y Eduardo Pons son el copropietario y el encargado de Propicarn SL, respectivamente.

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La empresa que Llorenç Gili fundó en 1999 para dar salida a las terneras y corderos de su granja de Artà ha evolucionado para proveer de un servicio integral a sus clientes, hostelería y supermercados, y es pionera en la introducción de carne envasada en bandejas. Propicarn es hoy una empresa con 40 trabajadores que no cejan en su empeño de vender un producto fresco y de calidad. No en vano, son productores locales y distribuyen a Mallorca, Menorca y Eivissa.

Toni Lluís Gili es el hijo de Llorenç, la segunda generación de un negocio que comenzaron su padre y su tío en su granja de Artà. Allí crían unas 1.200 terneras cada año y unos 200 corderos a la semana. Los sacrifican en el matadero de Manacor, y en las instalaciones de Santa Maria transforman el producto. Además, también recogen todo el cortero del campo mallorquín, sobre todo de las zonas de Llevant y el Pla. “Así, aseguramos una carne de mucha calidad, muy fresca, y servimos xot mallorquín de categoría excelente y ternera de Artà”, explica Toni Lluís Gili.

Hace seis años, Propicarn fue pionera en la implantación de nueva maquinaria para hacer ellos mismos las bandejas, y durante este tiempo no han cesado en su empeño de innovar. Ahora mismo hacen el despiece, fileteado y envasado, y también se encargan ellos de congelar la carne para distribuirla.

Ofrecen un servicio integral a supermercados, hoteles, colegios, carnicerías y restaurantes, ya que distribuyen ternera, cordero, cerdo, pollo y conejo, etc. “Somos capaces de dar soluciones tanto en las diferentes familias de carne como en los formatos de bandejas que necesitan”, explica el encargado Eduardo Pons. Sirven también hamburguesas y pinchos, y recientemente han dispuesto nuevas instalaciones en su afán de mejorar continuamente los procesos para adaptarse a las necesidades de sus clientes.

MÁXIMA CALIDAD. “Nuestras hamburguesas son de una calidad que no acostumbramos a probar”, indica Gili, y lo dice porque precisamente la calidad es una de las máximas de la empresa. Propicarn está certificada con el protocolo ISO 9001, de alimentación, y se está preparando para acreditarse también en la IFS (International Food Standard), que es un protocolo internacional de distribución de alimentación que garantiza que los productos son frescos y de calidad. Tienen también un departamento de calidad que supervisa cada una de las fases de la cadena de producción para ofrecer a los supermercados y a la hostelería un producto excelente.

En cuanto a la distribución a supermercados, proveen de la misma manera a pequeños establecimientos que a cadenas de supermercados y centros comerciales. Gestionan ellos mismos los murales con productos cárnicos que atienden todas las necesidades de los clientes.

PRODUCTO LOCAL. Propicarn defiende a ultranza el producto local y de kilómetro cero. “Comprando los corderos a los payeses estamos apoyando al campo mallorquín y al sector primario de Balears, que de otro modo tendría que malvender su producción a la Península. Además, somos un proveedor local. Nos ahorramos los costes de transportar esta carne de la Península, y la servimos lo más fresca posible. Es muy importante saber lo que comemos, y si es producto local tenemos la garantía de que tiene mejor sabor y mejor calidad”, puntualiza Pons.

Para Propicarn la innovación constante y la atención al cliente, a la hostelería y a los supermercados de Balears es la prioridad. “Ver la empresa es como ver un árbol crecer: una cosa lleva a la otra poco a poco, y nosotros somos un proveedor local, de manera que somos capaces de ofrecer un producto y un servicio al cliente mejor y más personalizado”, concluye Gili.