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Balears apuesta con fuerza por los productos y servicios de lujo, un segmento que demanda exclusividad y productos y servicios de alta calidad. Es un sector en crecimiento que deja ya más de mil millones de euros cada año en el Archipiélago.

El mercado del turismo de lujo en España prevé que las ventas de 2017 asciendan a 6.300 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 5% respecto a 2016, cuando la facturación global ascendió a 6.000 millones. Sin embargo, Balears no está bien posicionada en este segmento en comparación con otras regiones del país. Catalunya, Andalucía y Madrid superan a Balears en turismo de lujo.

En concreto, en 2017 Barcelona ha sido la ciudad más importante en cuanto a facturación del turismo de lujo, con un 29% sobre el global español, es decir, 1.827 millones de euros según la asociación Luxury Spain.

Marbella ocupa la segunda posición, con un 26% del pastel (1.638 millones de euros). Madrid ocupa la tercera posición con el 20% de las ventas, que ascienden a 1.260 millones. Eivissa está en la cuarta posición y aglutina el 9% del mercado del lujo en España, es decir, que la facturación en la isla por este segmento es de 567 millones de euros. Y Mallorca ha conseguido el 8% del pastel, con unas ventas de 504 millones de euros. En conjunto, el mercado del lujo en Balears deja una facturación superior a los mil millones de euros anuales, en concreto en 2017 se prevé de 1.071 millones.

El resto de ciudades y regiones de España se llevan el 8% del pastel (504 millones de euros).

Además, cabe mencionar el avance que se han anotado las Islas desde el año 2014 pese a que el mercado sigue repartido de manera muy similar: Eivissa ha ganado un punto porcentual del pastel del turismo de lujo, pasando del 8% al 9%, mientras que Mallorca ha ganado tres puntos porcentuales pasando del 5% al 8%.

A nivel español el turismo exclusivo ha experimentado un crecimiento sustancial en los últimos seis años, ya que ha pasado de los 4.500 millones de euros de facturación global en 2011 a los 6.300 millones de euros de 2017.

España ocupa el quinto lugar en el mercado del lujo dentro de la Unión Europea, por detrás de Francia, Italia, Alemania y Suiza. En cuanto a los puntos fueres de la oferta, según la asociación Luxury Spain son los productos y servicios basados en la exclusividad, la diferenciación, su calidad y excelencia, así como su tradición e innovación como valor diferencial.

El perfil del consumidor de productos y servicios de lujo en Eivissa, Mallorca y resto de zonas de España -diferente del de Madrid, Barcelona y Marbella- es de un hombre (51%) o una mujer (49%), casados (en el 80% de los casos) y con hijos (un 68% tienen descendencia). En cuanto al rango de edad, el más común (34% de los clientes) es de 35 a 44 años, con una renta per cápita de 150.000 euros de media. Son personas con estudios superiores: el 54% son graduados, el 26% tienen algún máster y el 10% son doctorados.

Este perfil de cliente de Mallorca y Eivissa difiere de las ciudades que lideran el segmento del lujo en España, principalmente en lo que respecta al poder adquisitivo, ya que el perfil del consumidor de Madrid, Barcelona y Marbella tiene una renta per cápita de 195.000 euros de media.

En España, los artículos que concentran un mayor volumen de ventas son los productos gourmet y de belleza, que suponen el 64% de la cifra total de negocio (4.260 millones de euros anuales), un mercado que ha aumentado un 11% en 2017. El turismo ocupa la segunda posición, mientras que completan el podio los servicios de calidad.

En concreto, el sector gourmet en España facturó 2,5 millones de euros en 2016 y se espera que alcance los 2,8 millones en 2017. Mientras que el sector de la belleza alcanzó los 1.632 millones el año pasado y la previsión de facturación para 2017 es de 1.758 millones de euros.

GASTO PROMEDIO. El gasto promedio anual en lujo alcanza casi los cincuenta mil euros, según la consultoría Luxury Consulting. La mayor partida se la llevan los automóviles de alta gama, a los que se destina de media 35.200 euros; le siguen la gastronomía, con un gasto promedio de 2.950 euros; el arte, con una media de gasto de 2.842 euros; la joyería, que genera un desembolso de 2.590 euros; la moda, el calzado y los accesorios, con un gasto de 2.259 euros, y finalmente la belleza, con un desembolso de 2.052 euros.

Las tendencias dentro del sector del lujo están cambiando. En los últimos años el deseo de ostentación ha desaparecido por completo y ha sido sustituido por la calidad, la personalización y la exclusividad. Las nuevas tecnologías también juegan un papel fundamental. En este sentido, una de las principales tendencias son las experiencias, ofrecer emociones y sensaciones únicas sea cual sea el producto o servicio que se ofrezca. Otra novedad es el fenómeno phy-gital, es decir, la integración del mundo digital con el físico. Algunos ejemplos del acercamiento entre lo online y lo offline son los códigos QR, la realidad aumentada o el streaming.

Finalmente, también se hace hueco el ecolujo o la preocupación por el medio ambiente, que pasa por incorporar la sostenibilidad en la estrategia de negocio.