Dejando a parte si la utilización de la forma jurídica escogida de real decreto, que en teoría se debe utilizar para temas excepcionales, es el adecuado en este caso, o de si es necesaria en estos momentos una moratoria de plazas turísticas, para mí el hecho de que el RD 3/2022 de medidas urgentes para la sostenibilidad y la circularidad del turismo de las Illes Balears establezca requisitos concretos de cumplimiento para los hoteles y demás establecimientos turísticos es un tema interesante y necesario.
Como explica la propia ley en su preámbulo, el turismo es el principal motor económico y social de las Illes Balears, representa casi el 50% del PIB, ofrece trabajo a más de 200.000 personas directamente y otras tantas indirectas y ha supuesto en los últimos años unos ingresos anuales superiores a los 16.000 millones de euros y no deberíamos cuestionarnos su existencia o no en las Islas, pero no todo es positivo, los residentes conocemos de sobra y sufrimos los «efectos colaterales» del mismo y debemos llegar a un equilibrio.
El turismo, además de ser creador de riqueza, tiene que contribuir a conservar y proteger los recursos de las Islas; parajes naturales, flora, biodiversidad, etc.., y para ello, según el decreto, los establecimientos turísticos van a tener que implantar una serie de medias y plasmarlo en un «plan de circularidad», teniendo especial importancia las áreas prioritarias como son el agua, la energía, los alimentos, los materiales utilizados y los residuos.
La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) explicó en un comunicado que los hoteles ya están poniendo en marcha muchas de estas medidas, y seguro que es así, pero otros no, y gracias al RD tendrán que hacerlo, si bien los establecimientos más pequeños tendrán más dificultades al tener que invertir recursos económicos, materiales y de tiempo.
Ahora bien, estas y otras medidas también tendrían que aplicarse a otros sectores económicos y no solo al turístico, como a la industria, las grandes superficies, etc., así como las diferentes administraciones públicas que deberían dar ejemplo en este aspecto.