Las redes sociales están sufriendo un cambio diferente a los habituales. Si bien es cierto que estamos acostumbrados a que lancen implementaciones continuas, ahora están redefiniendo algo más importante, su modelo de ingresos. Las implementaciones continuas, con cambios de funcionalidades y de aspecto de la interfaz, se deben generalmente a la respuesta de un tema psicológico y de adaptación. No quieren que nos aburramos de usar siempre «lo mismo» y acabemos abandonándolo, quieren retener al usuario. Aunque a menudo nos quejamos de algunas de esas funciones, porque las sacan justo cuando averiguamos cómo sacar partido a la anterior. Al final, nos adaptamos y continuamos usándolas.
Ahora los cambios vienen desde la parte financiera. Las redes sociales nunca han sido gratis. Nosotros hemos pagado de doble manera, con nuestra información y con nuestro consumo donde vemos ads que otros pagan. Algo que a la mayoría le parece mal, pero que realmente si lo sabes, lo puedes llegar a entender porque tú también sacas beneficio de su uso (siempre que lo hagas con cabeza y estratégicamente) y no son una ONG, son empresas.
Llegamos a la era de las redes sociales freemium, rozando el momento en el que finalmente sean redes sociales de pago por completo. YouTube, LinkedIn, Discord, Twitch, Twitter... y ahora se suma Meta, con Meta Verified. La tan «soñada» verificación por algunos (parte más narcisista de las redes) se va a tener a golpe de suscripción, si bien es cierto que realmente será una suscripción que merezca la pena si te dedicas profesionalmente a las redes ya que te ofrecerá más seguridad, más alcance y engagement y contacto directo con soporte. El precio será de 11,99 dólares desde la web y 14,99 dólares desde los markets de aplicaciones. ¿Tendrá más éxito que Twitter Blue? ¿La verificación será algo exclusivo o perderá su valor actual? Las redes, ¡siempre reinventándose!
