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Este 2024 está siendo, en muchas partes del mundo, especialmente Estados Unidos y Japón, una continuación de las subidas vistas en las bolsas en el pasado 2023, algo que no está pasando en España. El peor comportamiento del Ibex (de los pocos en rojo en 2024 en el momento de escribir el artículo) se entiende analizando el comportamiento de sus principales componentes. Hay que dejar de lado en esta explicación a Inditex, que sí sigue una tendencia alcista muy clara (el Ibex sin esta empresa estaría todavía mucho más separada de sus homólogos europeos) cotizando en máximos históricos y mostrando una resiliencia brutal ante condiciones cambiantes del mercado.

Sí se ha hablado en otras ocasiones aquí del impacto de la banca, principalmente de Santander y BBVA, que son los dos que más ponderan. Ambas tuvieron buenos resultados trimestrales, pero se empiezan a ver nubarrones tras las fuertes subidas del año pasado: por una parte, los márgenes de beneficios se han estrechado fruto de la bajada de tipos (aunque el Banco Central Europeo no los ha bajado aún, el Euribor ya se ha ido adelantando) y por otro se teme la recesión en Europa lo que provocaría un menor negocio para la banca.

De los dos el que ha mostrado más fortaleza es BBVA, que ha conseguido estos días alcanzar máximos históricos (descontando los dividendos). Precisamente este nivel de 9,40 euros es la clave para continuar viendo subidas. En caso de no poder romperlo un recorte a precios algo inferiores a ocho euros sería lógico. Santander, por su parte, que sí está muy lejos de los máximos históricos, además lastrado las últimas semanas por las noticias sobre dinero de Irán en las cuentas del banco, debería consolidar por encima de los 3,55 para poder ver una continuación de tendencia alcista.
Las telecomunicaciones han perdido mucho peso en Ibex, Telefónica pasa a ser la undécima empresa si atendemos a la capitalización en el selectivo, superada por otra «teleco» (más centrada en alquiler de torres) como Cellnex. A ambas, como empresas defensivas, les debería ir bien el entorno incierto en el que se mueve la economía. Mientras Telefónica se mueve en un lateral algo aburrido tras los movimientos bruscos provocados por la entrada de Arabia Saudí y por el anuncio de compra por parte del propio gobierno español. Sin duda, el nivel de 3,95-4 debe ser superado para intentar retomar las subidas fuertes. En el caso de Cellnex, muy lastrada por los tipos de interés (es casi más empresa inmobiliaria por el alquiler de torres de telecomunicación que una propia empresa de telecomunicaciones).

Precisamente, las perspectivas de bajadas bruscas de tipos le han ido bien desde noviembre, pero el enfriamiento actual le han llevado a niveles de 33 euros que debería respetar para ver subidas adicionales; de lo contrario, el próximo soporte está en 29,50.

Por último, las eléctricas tienen también una ponderación muy relevante en la bolsa española. Iberdrola como su principal componente ha sufrido caídas significativas desde máximos históricos, en los últimos días fruto, seguramente, de los bajos precios de la electricidad. El nivel actual (10,75-11) es un buen soporte (el siguiente estaría situado por debajo de 10 euros).