Este fue el tema principal del discurso en el que abordó el número de turistas que acogió Mallorca en los últimos años y que provienen mayoritariamente de Alemania, Reino Unido y del resto de España.
Por otro lado, hizo referencia a los datos de la investigación de impacto económico (EIR) globales y, concretamente, de España. Admitió que «el 2024 será un año récord para el sector de turístico en España. Contribuirá con casi 225 mil millones de euros al PIB, lo que representa un aumento del 12% en comparación con los niveles máximos del 2019. Nuestro sector probablemente representará el 15% de la economía nacional este año».
Simpson también apuntó a un crecimiento del empleo, que estará cerca de los tres millones de trabajadores en el conjunto del estado y señaló que «esto es realmente importante. La creación de empleo es la formula que empleamos para financiar los los servicios públicos, cómo construimos cosas, cómo ayudamos a las personas a salir de la pobreza y cómo podemos invertir en el futuro». Asimismo, admitió que «estamos creciendo más rápido que casi cualquier otro sector» y se espera que en la próxima década el sector «crezca alrededor del 2,4% anual en España. Es el doble de rápido que la economía en general, que está previsto que mejore sólo el 1,2%».
La sostenibilidad fue otro de los temas que abarcó Simpson y apostó por la descarbonización, tanto aérea como terrestre y reclamó a la Unión Europea facilidades para ayudar a realizar el cambio de combustibles. Sin embargo, Simpson también propuso otras soluciones para proteger nuestro destinos como viajar en temporada baja, ofrecer tarifas más económicas en invierno o ayudar a los viajeros a descubrir nuevos destinos. «Sigamos trabajando por un futuro más inclusivo y sostenible. Protejamos el paraíso, allí donde sea que lo encontremos», finalizó diciendo la presidenta del Consejo Mundial.