El objetivo del estudio es revertir el crecimiento descontrolado del tráfico. | A.. SEPULVEDA

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El presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, presentó el pasado miércoles 23 de octubre el ‘Estudio de la capacidad de carga de la Red Viaria del Consell de Mallorca’. Además, Galmés anunció la limitación de entrada de coches a la Isla y un cupo diario de vehículos que puedan entrar. Asimismo, la propuesta impone aplicar restricciones de acceso de vehículos a Mallorca, priorizando los vehículos de residentes sobre los vehículos de alquiler. La restricción podría ir ligada con una tasa diaria de circulación para los coches de alquiler y para aquellos que no paguen el impuesto de circulación en Balears.

El objetivo principal del estudio es «revertir el crecimiento descontrolado del tráfico y atendiendo a la situación de saturación que sufren algunos tramos de la red de carreteras de Mallorca, especialmente en determinadas épocas del año», de este modo, el informe «se centra en la situación de saturación de la red viaria de la isla». Los datos que expone es que sobran entre 93.599 y 122.397 coches, por dicho motivo el informe presenta dos propuestas de techo de vehículos, que consiste en la capacidad de coches que un territorio puede soportar sin que haya una sensación de saturación. El número máximo de vehículos que sugiere como propuesta más restrictiva es de 834.263 y de 863.061 como menos liberal. Al inicio del año el número de coches de residentes era de 829.825, por lo que apenas habría margen para los coches de alquiler para cumplir el techo vehicular propuesto.

Por otro lado, el estudio considera algunas zonas de la Isla como puntos prioritarios y plantea una serie de propuestas de actuación. El informe considera como preferentes las travesías de Estellencs, Banyalbufar, Deià, Can Picafort y Campos; mirador de Sa Foradada; Port de Sóller; Formentor; entrada a la playa de Alcúdia; faro de Ses Salines; acceso a Manacor y a Sa Calobra. Además considera que aquellos puntos con una alta saturación requieren de un estudio específico, a parte de ejecutar actuaciones de mejora de la infraestructuras, del transporte público o rutas alternativas.

Finalmente, el estudio presenta una serie de propuestas concretas para la mejora del tráfico en las zonas establecidas. Por otro lado, sugieren reducir el uso del vehículo privado, la gratuidad del transporte público y la mejora de su servicio por carretera, la ampliación de la red ferroviaria y de los carriles reservados para el transporte público; la creación de carriles prioritarios; la ampliación de la red de aparcamientos disuasorios; la promoción de la movilidad colaborativa; información en tiempo real del estado de saturación de las carreteras, y la aplicación de restricciones a la entrada de vehículos y tasas.