Miles de personas se manifestaron en Teherán a favor del régimen teocrático iraní.

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EUROPA PRESS - TEHERÀN El régimen iraní acusó ayer a Estados Unidos de haber provocado los violentos disturbios de los últimos días y prohibió toda nueva manifestación estudiantil.

Un alto dignatario chiíta, el ayatolá conservador Hassan Tahéri-Joramabadi, acusó a Estados Unidos y a otros países extranjeros, que no nombró, de haber «provocado y avivado» esos incidentes que provocaron dos muertos según un balance oficial.

«Habeis visto hasta qué punto nuestros enemigos exteriores y sobre todo Estados Unidos han provocado las agitaciones», subrayó el ayatolá conservador Hassan Taheri-Joramabadi en la oración semanal de la universidad de Teherán.

«Estados Unidos no tolera un régimen islámico sólido y estable en el mundo», aseguró. «Incitando a los agitadores, quiere hacer comprender a los demás países que no hace falta tener buenas relaciones con Irán», añadió, dirigiéndose a la multitud de miles de personas presentes en la oración.

«Piensa que prendiendo fuego a algunos bancos o atacando las mezquitas, el régimen tocará a su fin», indicó el ayatolá Joramabadi, próximo al Guía de la República y número uno del régimen, el ayatolá Alí Jamenei.

«Todo ésto no está terminado aún y los basiyi (milicianos voluntarios) y las fuerzas del orden así como la población deben estar vigilantes y listos», agregó pidiendo «a los dirigentes de las diferentes facciones que se unan en torno al Guía».

La multitud que asistía al acto religioso llevaba pancartas con palabras del ayatolá Jamenei como «Al menor signo del guía intervendremos» o «Obedeceremos».

El ministro del Interior, Abdolvahed Moussavi-Lari, anunció por su parte a la televisión que ninguna nueva manifestación sería autorizada en los próximos días en Irán.

Según fuentes estudiantiles, una manifestación estaba prevista para hoy con objeto de defender las reivindicaciones de los estudiantes, en primer lugar la destitución del jefe de la policía iraní y la restitución de los cuerpos de las víctimas de los recientes enfrentamientos.