Los datos del paro de Alemania y la productividad de Estados
Unidos. Estos fueron los aspectos en los que se fijaron ayer los
inversores europeos y norteamericanos a la hora de materializar sus
operaciones en Bolsa. Sin embargo, se ha puesto de manifiesto que
hay una falta de referente absoluto en los mercados
internacionales, que se agarran a un clavo ardiendo para justificar
los altibajos bursátiles.
El temor ante la subida de los tipos de interés en ambas partes
del Atlántico es uno de los rumores más candentes, justificado ayer
por el dato de paro de julio de Alemania, que se cifró en cuatro
millones de desempleados. Si a todo ello se suma la apatía del mes
de agosto, el resultado es explosivo: jornada negra para los
parqués, incluido el madrileño, cuyo índice cedió cerca de 20
puntos.
Tanto en Madrid como en las principales plazas europeas se
impusieron las órdenes de venta y la pérdidas fueron generalizadas
para todos los sectores. En este marco, Londres perdió un 2'1 por
ciento; París, un 1'98 por ciento; Francfort, un 2'75 por ciento; y
Milán, un 2'10 por ciento. Wall Street, que abrió sus puertas con
fuertes caídas, mostraba una leve recuperación a media sesión, a
pesar de la caída del índice de productividad de Estados
Unidos.
El número de desempleados en Alemania sobrepasó en julio la
barrera psicológica de los cuatro millones y la tasa de paro se
estableció en el 10'3 por ciento de la población activa, frente al
10'1 por ciento registrado en junio, según anunció ayer la Oficina
Federal de Trabajo, que registró en julio 4'0272 millones de
personas en busca de empleo, lo que supone un aumento de 89.000
personas con relación a junio.
El número total de parados se había situado por debajo de los
cuatro millones en mayo, por primera vez desde noviembre de 1998.
La tasa bruta de julio, es decir sin corregir las variaciones
estacionales, coincide con las previsiones de los analistas, que
esperaban una tasa de entre el 10'3 y 10'5%. En la parte occidental
del país, la tasa bruta de desempleo subió hasta el 8'6% en julio,
frente al 8'4% anotado en junio. En los laender de la ex RDA, la
tasa pasó al 17'4 por ciento, tras resgistrar un 16'8 por ciento en
junio.
Según el presidente de la Oficina, Bernhard Jagoda, el alza del
desempleo se atribuye en su mayor parte a factores estacionales.
«El período de vacaciones y el fin de los estudios de formación
profesional y escolares pesan regular y provisionalmente en el
mercado de trabajo», explicó en un comunicado.
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