El ministro del Interior libanés, Michel Murr, afirmó ayer que una
fuerza mixta se desplegará esta noche en esta región, evacuada por
Israel el pasado 24 de mayo después de 22 años de ocupación.
Murr, que hizo esta afirmación después de una reunión de
importantes responsables políticos y de seguridad libaneses, señaló
que dicha fuerza libanesa «espera el término de la instalación de
la FINUL» (Fuerza Interina de las Naciones Unidas en el Líbano) en
la frontera con Israel. La fuerza mixta estará al mando del jefe de
las Fuerzas de Seguridad Interior (FSI), Nassik Abi Nader, y tendrá
sus cuarteles generales en las ciudades de Marjeyun, a unos 70
kilómetros al sudeste de Beirut, y Bint Jbeil, unos 20 kilómetros
más al sur. «Dicha fuerza, formada por 500 policías y 500 soldados,
podrá pedir refuerzo al Ejército en caso de necesidad, como lo
estipulan las leyes en vigor», agregó el ministro libanés.
La FINUL completó ayer su despliegue en la zona que Israel
ocupaba en el sur de Líbano y se instaló en 19 posiciones. Tras la
retirada israelí del sur libanés, la seguridad en la zona estaba a
cargo de las milicias chiítas libanesas Amal y Hizbulá, ante la
ausencia de la FINUL y del Ejército libanés. Desde 1982, los
combatientes chiítas, en especial Hizbulá (Partido de Dios), se
atribuían la mayoría de las operaciones militares contra Israel y
tras la evacuación de las tropas de este país del sur instalaron
una serie de posiciones cerca a la frontera.
El secretario general de Hizbulá, jeque Hasan Nasrala, había
afirmado que sus combatientes no sustituirán al Estado, al que le
corresponde tomar a su cargo la seguridad de la zona. Esto no
impide que la FINUL y la fuerza mixta libanesa tengan que cohabitar
con este grupo pro iraní, como anteriormente lo había hecho con los
guerrilleros palestinos (1978-1982).
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