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EFE-NUEVA YORK «En nuestra opinión, éste es un movimiento que cambia el juego. Y estamos jugando para ganar», señaló categórica Carly Fiorina, directora ejecutiva de Hewlett-Packard, durante una rueda de prensa celebrada en Nueva York en la que anunció la operación. La adquisición por fusión contempla un canje de acciones por valor de 25.000 millones de dólares (4'5 billones de pesetas). Los accionistas de Compaq recibirán 0'6325 títulos de HP por cada una en su poder. Las acciones de Compaq han sido valoradas en 14'68 dólares, lo que supone una prima de un 19 por ciento sobre el precio que tenían al cierre del viernes en la bolsa de Nueva York.

La compañía resultante mantendrá la marca HP y se convertiría en la mayor del mundo en la venta de ordenadores personales, por delante de Dell Computer, que lidera este sector. En la nueva empresa, HP contará con el 64 por ciento de la propiedad y Compaq con el 36 por ciento, y al frente del consejo de administración y como directora ejecutiva permanecerá Carly Fiorina, que hasta ahora dirige HP, mientras que Michael Capellas, director ejecutivo de Compaq, ocupará la presidencia. Se calcula que la compañía tendría unos ingresos de 87.400 millones de dólares anuales y que conseguiría un ahorro de 2.500 millones de dólares en costes a mediados del año fiscal 2004.

«Hasta que no tengamos la aprobación de las autoridades reguladoras, ambas compañías seguirán operando y compitiendo por separado», explicó Fiorina en su comparecencia ante la prensa. Agregó que aún no habían mantenido discusiones en serio con las autoridades de la Unión Europea (UE) ni de Estados Unidos, pero subrayó que el acuerdo «se ha pensado de forma muy cuidadosa» y esperan que quede cerrado en la primera mitad de 2002. Y es que las autoridades norteamericanas y de Bruselas prevén que puede haber obstáculos para la adquisición. Los ejecutivos explicaron que aún no había cifras concretas sobre el efecto que la fusión tendrán sobre la plantilla de trabajadores ni sobre los países que se verán afectados por posibles recortes.

La nueva compañía operaría en 160 países y tendría unos 145.000 empleados. Pese al hermetismo, fuentes de HP anunciaron que la adquisición supondrá el despido de alrededor de 15.000 trabajadores. Los inversores de Wall Street acogieron el anuncio de compra con poco entusiasmo, a juzgar por el descenso que registraba el valor de las acciones de ambas empresas. De completarse esta fusión, que comenzó a gestarse en conversaciones telefónicas entre Fiorina y Capellas hace unos dos meses, aparecerá un formidable competidor para empresas como IBM y Sun Microsystems en el mercado de servidores para corporaciones, el más lucrativo y con más futuro de la industria.