En un intento de insuflar optimismo acerca de la marcha de la
guerra, el Pentágono anunció ayer un nuevo escalón en su
estrategia, con el envío de más tropas a Afganistán, la
intensificación de los bombardeos y el aumento de la ayuda a los
rebeldes. El Pentágono, que estaba comenzando a recibir críticas
por la marcha de la campaña sobre Afganistán, insistió ayer en que
las operaciones se desarrollan según lo previsto y se esforzó en
mostrar optimismo, incluso ante la llegada del invierno.
«La guerra marcha según lo planeado», aseguró ayer el jefe de la
Junta de Estado Mayor, general Richard Myers, quien insistió en que
el conflicto se desarrolla según el guión marcado, que incluye una
intensificación de las operaciones en las próximas semanas. La idea
con la que trabaja el Pentágono es aumentar los suministros de
armas y material a los rebeldes afganos, mientras, de forma
paralela, el aumento de los ataques aéreos sobre las líneas del
frente debilita a los talibanes. Ayer EE UU lanzó su mayor ataque
con más de 100 bombas en cinco horas.
El diario «The Washington Post» señaló ayer que los rebeldes
están preparándose para una ofensiva sobre la capital una vez que
los ataques de EE UU debiliten un poco más a sus rivales. Myers, en
declaraciones a la cadena de televisión NBC, aseguró que «estamos
bombardeando sus almacenes y depósitos de municiones. Lo que les
queda a los talibanes es lo que llevan a la espalda, y no es
mucho».
El jefe militar indicó que la llegada del mal tiempo, que en los
últimos días ha causado problemas a las operaciones
norteamericanas, acabará siendo una ventaja para EE UU y la Alianza
del Norte. «Vamos a luchar durante el invierno, no vamos a parar»,
dijo el general Myers, quien añadió que el aumento de la entrega de
armas, alimentos y material para el invierno reforzará a la Alianza
del Norte.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.