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AGENCIAS-KABUL Los jefes tribales del sur de Afganistán intentaron ayer obtener la rendición del mulá Mohamed Omar, el jefe supremo de los talibán, mientras la aviación norteamericana reanudaba sus ataques, interrumpidos en una semana. Al menos 30 civiles podrían haber muerto el jueves durante un bombardeo de Estados Unidos contra varios reductos de resistencia de combatientes de la red terrorista Al Qaeda, dirigida por el millonario de origen saudí Osama bin Laden, en el este de Afganistán, según la agencia Afghan Islamic Press (AIP), con sede en Pakistán, que cifró el número de muertos en 32. Los aviones estadounidenses volvieron ayer a bombardear este campamento.

En EE UU, la Oficina Federal de Investigación (FBI) prolongó el estado de alerta antiterrorista sobre el territorio norteamericano hasta el próximo 11 de marzo, a causa del «nivel aún elevado de informaciones sobre amenaza general». La situación debería desbloquearse en los próximos días en la provincia de Helmand (sur de Afganistán), donde parece que el mulá Omar se esconde con sus partidarios entre las montañas, según un responsable de los servicios afganos de información, Nasratulá Nasrat.

Desde el pasado martes se lleva a cabo una shura (asamblea de notables locales) del sur para evitar un «baño de sangre», mientras las fuerzas afganas de la zona, ayudadas por miembros de las fuerzas especiales norteamericanas, rastrean la región de Bagran en busca de combatientes talibán. Sobre Osama bin Laden, Karzai estimó que todavía se encuentra vivo. «Quizás esté en Afganistán o fuera. Nosotros también lo buscamos y (cuando lo encontremos) será igualmente entregado para ser juzgado», declaró.

Por otro lado, un panfleto con un fotomontaje que muestra a Osama bin Laden sin barba, «de civil» y calificado de «cobarde», invitando a sus partidarios a rendirse, es difundido por los estadounidenses estos días en Afganistán, indicó ayer el Pentágono. Titulado «no muera en vano» en su traducción en inglés del texto en lenguas vernáculas, el panfleto entregado a la prensa muestra al extremista islámico tal como podría aparecer si se hubiera disfrazado para huir de Afganistán.

Los pasquines propagandísticos de EE UU que muestran a un Osama bin Laden joven, sin barba y con ropa occidental, han recibido numerosas críticas en los propios Estados Unidos, e incluso se teme que puedan resultar contraproducente. Asimismo, un militar estadounidense murió ayer en un enfrentamiento en el este de Afganistán, y se ha convertido en el primer miembro de las fuerzas armadas muerto en acción en este país, indicaron fuentes del Pentágono.

La muerte ocurrió durante un enfrentamiento cerca de la ciudad afgana de Khost, en el este del país y cerca de la frontera con Pakistán, y también hubo varios heridos estadounidenses. Estados Unidos va a aprovechar la guerra en Afganistán para instalar una base aérea a largo plazo en el remoto Kirguizistán, lo que supone un gran cambio estratégico en la complicada región de Asia Central. La base permitirá a Estados Unidos tener un punto avanzado junto a Rusia y China, desde el que podrá operar en Afganistán y el resto de Asia Central.