Dos civiles y dos guerrilleros fallecieron en diferentes hechos
ocurridos en Colombia durante el transcurso de las elecciones
presidenciales celebradas ayer en este país sudamericano. Además
resultaron heridos al menos otras cuatro personas, según informaron
las autoridades. De todos modos, desde el Gobierno se recalcó que
si bien se produjeron altercados no hubo grandes incidentes en la
jornada electoral.
Con el trasfondo de la violencia, las coacciones y las amenazas,
contra las que fueron movilizados más de 212.000 efectivos
militares y policiales, Colombia avanzó ayer en la primera vuelta
de las elecciones presidenciales que proclamarán al sucesor del
conservador Andrés Pastrana.
Sólo en cinco de los 1.098 municipios del país no pudieron
celebrarse las votaciones por sabotajes de la guerrilla de las
FARC, que además ha mantenido hostigamientos y ataques aislados en
otras localidades, cuyo número no ha sido facilitado.
Asimismo, apenas 232 de las 60.214 mesas instaladas para estos
comicios debieron ser trasladadas, por seguridad, según los
informes facilitados en Bogotá por el Gobierno y la Registraduría
Nacional del Estado Civil (estatal responsable de las elecciones).
«Invitamos a todos y cada uno de los colombianos que tienen el
derecho para elegir presidente de Colombia a que salgan hoy y
depositen su voto», dijo el gobernante poco después de que
depositara el primer sufragio en la concentración electoral de esa
plazoleta.
Pastrana dijo que mientras la principal guerrilla del país
persiste en las acciones terroristas, hasta con instrumentos no
convencionales, como el de bombas preparadas en cilindros
(bombonas) de gas doméstico, «nosotros vamos a utilizar el arma más
importante que tenemos, que es el arma de la democracia, el
voto».
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