Estados Unidos aumentó ayer la presión en Bruselas sobre los tres
aliados «recalcitrantes» al recordar el embajador de ese país ante
la OTAN, Nicholas Burns, que «en conformidad con el Artículo IV,
todos nosotros estamos obligados a ayudar a Turquía en su defensa».
En la quinta reunión que el Consejo Atlántico celebra en tres
días en Bruselas, los embajadores de los diecinueve países aliados
no lograron un consenso por la oposición de París, Berlín y
Bruselas a aceptar «ahora» el comienzo de los preparativos
militares para defender a Turquía de un hipotético ataque
iraquí.
Estados Unidos presentó un nueva plan que prevé limitar las
demandas de apoyo de la OTAN en caso de guerra contra Irak a
medidas centradas en la protección de Turquía, como el envío de
aviones-radar aliados AWACS, misiles y antimisiles Patriot, y
unidades especializadas en la lucha contra las armas nucleares,
bacteriológicas y químicas.
El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, se
preguntó ayer si lo que realmente quieren Francia y Alemania, con
su oposición a la acción militar, es «sacar del apuro» al
presidente iraquí, Sadam Husein. Asimismo, afirmó Washington
actuará en Irak aun en el caso de que la ONU demuestre su
«inutilidad» y no tome ninguna decisión en este sentido.
Un influyente consejero del Pentágono, Richard Perle, consideró
ayer que la OTAN debería considerar seriamente excluir a Francia de
su proceso de decisiones. Perle, que acusa a Francia de llevar a
cabo una política para reducir la influencia estadounidense en
Europa y en el mundo, estimó que el bloqueo en curso en la Alianza
Atlántica sobre los preparativos para una eventual guerra en Irak
revela una línea de fractura sobre la voluntad francesa de hacer de
Europa un contrapeso a Estados Unidos.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.