Hasta ahora, una quincena de países de la Alianza Atlántica, de un
total de 26 miembros, han desplegado tropas en Irak, pero la OTAN
se limita a prestar apoyo a la división bajo el mando de Polonia.
Pero si Bush esperaba que el consenso alcanzado con la resolución
se prolongara hasta Estambul, ayer ya ha sufrido un primer revés.
En una rueda de prensa, el presidente francés indicó que «estamos
abiertos a cualquier conversación, pero intervenir en Irak no se
ajusta al papel de la Alianza».
Pero su colega francés, Jacques Chirac, desestimó en principio
esta posibilidad e indicó que sólo la consideraría si el nuevo
gobierno iraquí, que debe asumir el poder el 30 de junio, lo
solicita de manera expresa. Bush planteó está posibilidad en varias
reuniones bilaterales que ha mantenido en Sea Island con los demás
líderes del G-8 (Alemania, Canadá, EEUU, Francia, Italia, Japón,
Reino Unido y Rusia).
La implicación de la OTAN en Irak fue uno de los asuntos que
dominaron su reunión de ayer con el primer ministro británico, Tony
Blair, su principal aliado. Bush, visiblemente satisfecho después
de que el Consejo de Seguridad de la ONU aprobara por unanimidad el
martes la nueva resolución sobre Irak presentada por EEUU, indicó
que varios miembros de la OTAN ya cuentan con tropas en ese país y
que espera «ampliar un poco» ese papel.
La Alianza Atlántica «debe implicarse» en Irak, insistió Bush,
quien agregó que «trabajaremos con nuestros amigos de la OTAN» para
garantizar la permanencia en Irak de los países ya presentes y dar
un papel más relevante a la Alianza Atlántica en el país árabe. El
presidente de EEUU parecía dispuesto a aprovechar el impulso
cobrado con la aprobación de la resolución para mejorar las
relaciones con sus aliados europeos y lograr mayores respaldos en
Irak cuando la OTAN celebre a finales de mes su cumbre en
Estambul.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.