EfeMadrid24/07/05 0:00
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La comunidad internacional ha condenado de forma unánime y calificado de sinrazón los atentados de ayer en la localidad egipcia de Sharm el Sheij, que han causado al menos 90 muertos y más de cien heridos. Los mensajes de condolencias que los dirigentes mundiales le enviaron al presidente egipcio, Hosni Mubarak, por las víctimas inocentes de todas las nacionalidades, expresan la común repulsa y horror, así como la necesidad de una acción común para acabar con el terrorismo, un combate que «no se puede perder».

Desde la ciudad china de Beijing, donde el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se encuentra de visita institucional, el jefe del Ejecutivo español mostró su solidaridad con las víctimas y condenó firmemente los atentados terroristas. Zapatero quiso dirigir sus primeras palabras a los tres españoles heridos, «están teniendo toda la atención por parte de nuestro servicio diplomático», afirmó. A continuación, expresó su más sincera repulsa y condena por esta «nueva barbarie del terrorismo internacional» e hizo un llamamiento a la máxima cooperación entre todos los gobiernos del mundo «para que derrotemos esta lacra».

El presidente egipcio Hosni Mubarak afirmó «su determinación de continuar la lucha contra el terrorismo» y dijo que «no cederá al chantaje» tras estos atentado. «Este acto criminal, cobarde, que busca desestabilizar a Egipto, reforzará nuestra determinación de continuar la lucha contra el terrorismo y erradicarlo».

La secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, calificó de «sinsentido» los atentados. «Nuestros pensamientos y rezos están con las familias de las víctimas inocentes de numerosas naciones que han sufrido este ataque sinsentido», dijo Rice.

El presidente ruso, Vladímir Putin, consideró que la pretensión de los terroristas es «obligar al mundo civilizado a vivir en un ambiente generalizado de miedo y de violencia». Según Putin, «la respuesta a esos desafíos a la humanidad debe ser nuestra unidad y nuestra acción conjunta para repeler la amenaza de la barbarie».

El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, indicó que las bombas de Sharm el Sheij son una «atrocidad contra todos los pueblos».