El Estado de Israel debe ser «borrado pronto del mapa», proclamó
ayer el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, en un momento de
fuerte tensión con los países occidentales, especialmente por las
aspiraciones nucleares del régimen islámico de Teherán.
«Como dijo el imán (el ayatolá Jomeini), Israel debe ser borrado
pronto del mapa», declaró el ultraconservador Ahmadineyad en un
discurso con motivo de una conferencia sobre «El mundo sin el
sionismo», ante los más de 4.000 estudiantes que participaban en la
misma.
Es la primera vez desde hace años que un dirigente iraní
preconiza en público la desaparición del Estado de Israel, aunque
los llamamientos de este tipo forman parte de la propaganda del
régimen de Teherán.
Las palabras de Ahmadineyad llegan en un momento de fuerte
tensión entre Irán y los países occidentales, especialmente por la
negativa de Teherán a abandonar su programa nuclear.
Israel y Estados Unidos han visto en ellas la confirmación de
que los iraníes quieren dotarse de armas nucleares bajo la
cobertura de producir electricidad con fines civiles.
Anoche, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel
Moratinos, convocó al embajador iraní en España para pedirle
explicaciones por las declaraciones de Ahmadineyad. El Ministerio
informó que Moratinos «ha expresado su rechazo en los términos más
tajantes» a estas declaraciones y que, por ello, ha decidido la
«urgente convocatoria» del embajador iraní para pedirle
explicaciones.
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