Carne de caballo es mostrada en una carnicería de Bremen. | INGO WAGNER

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La policía británica detuvo ayer a tres personas en Inglaterra y Gales en relación con el escándalo de la carne de caballo encontrada en productos etiquetados como vacuno. Los tres hombres, de entre 42 y 63 años, fueron arrestados en dos plantas de procesado industrial de carne en las localidades de Aberystwth, en Gales, y Todmoreden, en el condado de West Yorkshire, al norte de Inglaterra.

Los detenidos, bajo sospecha de haber cometido un fraude, permanecen retenidos a la espera de ser interrogados tanto por la policía como por personal de la Agencia de Estándares Alimentarios del Reino Unido (FSA), que había inspeccionado ambas plantas el pasado martes.

Bute

Las detenciones se produjeron en un día en el que salió a la luz que un antiinflamatorio conocido como «bute» podría haber entrado en al cadena alimenticia a través de carne de caballo.

También ayer, la cadena de supermercados Asda anunció que ha procedido a retirar en el Reino Unido los botes de 500 gramos de su salsa boloñesa preparada, después de que un test sugiriera la presencia de ADN equino en el producto, informó la cadena BBC.

La cadena de supermercados retiró además como precaución otros tres productos que contenían vacuno y procedían del mismo productor de la salsa boloñesa: un caldo de ternera, otra salsa para espaguetis y una sopa de chile con carne.

Mientras, carne de caballo contaminada con el analgésico antiinflamatorio conocido como «bute» procedente del Reino Unido puede haber entrado en la cadena alimenticia de Francia, informó el secretario de Estado británico de Agricultura, David Heath.

En una comparecencia ante el Parlamento, Heath dijo que en los últimos test efectuados por la Agencia de Estándares Alimentarios británica (FSA), ocho caballos sacrificados en mataderos del Reino Unido dieron «positivo» por esa sustancia, potencialmente dañina para los humanos. Precisó que «ocho de los caballos (sometidos a esas pruebas) dieron positivo y tres podrían haber entrado en la cadena alimentaria en Francia. Los cinco restantes no han entrado en la cadena».