La familia y sus abogados se arrodillaron frente al juzgado durante 8 minutos y 46 segundos, el tiempo que Chauvin apretó su rodilla contra el cuello de Floyd mientras el afroamericano, tendido en el suelo y esposado llamaba a su madre y repetía: «¡No puedo respirar!».
De manera simbólica, la familia se arrodilló frente al juzgado exactamente a las 8.46 hora local (13.46 GMT).
El hermano de George Floyd, Terrence, reconoció que ha visto «muchísimas veces» las imágenes de la muerte de su hermano, que fue grabada en vídeo por cámaras de seguridad y móviles de transeúntes, lo que ocasionó el año pasado la indignación de buena parte de EE.UU. y protestas en todo el país.
«He visto el vídeo muchísimas veces. ¿Sabéis por qué? Porque así puedo volver a escuchar su voz otra vez. (...) Todo el mundo está atento a esto», afirmó Terrence.
«Este es un momento histórico, y todo el mundo está pendiente», insistió.
Asimismo, el abogado de la familia Floyd, Ben Crump, consideró que el juicio es un «referéndum sobre cuán lejos se ha llegado en este país por la libertad y justicia para todos».
Floyd murió el 25 de mayo de 2020 después de que Chauvin y otros agentes quisieran detenerle bajo la sospecha de haber intentado usar un billete falso de 20 dólares en un supermercado.
El ahora expolicía está acusado de tres cargos que, de mayor a menor gravedad, son asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años, y homicidio en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad.
Este lunes comienza «de facto» el juicio con la presentación de los argumentos iniciales por parte de la defensa y acusación.
La agresión provocó las mayores protestas contra el racismo en Estados Unidos desde el asesinato de Martin Luther King Jr a finales de la década de 1960.
3 comentarios
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@Victor, una cosa es que los policías no te traten como el szafato de un avión, y otra es que te torturen causándote la muerte por asfixia. Esto nunca debiera haber ocurrido. Delincuente o no se le debería haber detenido en condiciones normales y puesto a disposición de la justicia.
@victor.Blanco o negro, si era delincuente o no, lo tenía que decidir un juez. Y el castigo que pudiera merecer, también tenía que decidirlo un juez. Así funciona un estado de derecho, ese que deseamos todos para nosotros y para nuestros hijos. Por cierto, el que le mató, estando en el suelo y esposado, es un asesino.
Antes que negro, era un delincuente.